Periodistas, artistas, deportistas... así reprime Irán a sus rostros populares para dar ejemplo
El ahorcamiento público del campeón nacional de kárate o la condena a 26 años de cárcel a un futbolista, son mensajes para el resto de la ciudadanía, que ni siquiera tiene la opción de huir
Sara Khadem está entre las mejores ajedrecistas del mundo. Hace unos días, Leontxo García la entrevistó para EL PAÍS Semanal, donde contó por qué huyó de su país y se ha instalado en España. El motivo es que el 26 de diciembre jugó sin velo, una falta muy grave en Irán, durante el Mundial de Ajedrez Rápido en Kazajistán. Lo hizo para protestar por la muerte de Mahsa Amini, la joven de 22 años fallecida bajo custodia policial el 16 de septiembre, tres días después de ser detenida por la policía de la moral en Teherán acusada de llevar mal colocado el velo obligatorio.
Khadem pudo huir y evitar las represalias que han sufrido otros rostros conocidos, a los que el régimen de los ayatolás usa para dar ejemplo al resto de la población. Como cuenta Trinidad Deirós en este podcast, en ese perfil destacan personas populares en Irán, como la escaladora Elnaz Rekabi o el futbolista Amir Nasr Azadini, condenado a 26 años. Lo mismo ocurre con las ejecuciones, sobre todo las que se llevan a cabo en público, como la del campeón nacional de kárate, Mohamed Mehdi Karami, ahorcado en enero con solo 22 años. El mensaje que pretenden mandar es el siguiente: no importa si eres conocido, si te manifiestas, puedes pagarlo con la vida.
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