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Opinión
Texto en el que el autor aboga por ideas y saca conclusiones basadas en su interpretación de hechos y datos

La crisis de salud mental en jóvenes

Los lectores escriben sobre la falta de atención psicológica en la sanidad, la tregua en Gaza, la incertidumbre ante el futuro y la felicidad

Salud mental jóvenes
L. Rico (EFE)

Los problemas de salud mental entre los jóvenes han aumentado de manera alarmante en los últimos años. Según un informe reciente del Ministerio de Sanidad, las consultas psicológicas en menores de 30 años han crecido un 40% desde 2020, una cifra que muchos expertos vinculan con la pandemia, la crisis económica y el uso excesivo de redes. A pesar de esta creciente demanda, la sanidad pública sigue sin contar con suficientes psicólogos y psiquiatras. España tiene una de las tasas más bajas de especialistas en salud mental de Europa, con apenas seis psicólogos por cada 100.000 habitantes. Esto ha llevado a que los tiempos de espera para recibir tratamiento en la Seguridad Social sean cada vez más largos, lo que empuja a muchas familias a recurrir a la sanidad privada. Los expertos advierten que, sin una inversión significativa en salud mental, esta crisis seguirá empeorando, afectando no solo a los jóvenes, sino a toda la sociedad.

Gerard Olona Riera. Castelldefels (Barcelona)

Solo un respiro

El reciente intercambio de prisioneros entre el Estado Israel y el grupo terrorista Hamás es un paso crucial en la tregua de Gaza, pero también refleja la fragilidad del acuerdo. La demora en la entrega de prisioneros muestra las tensiones y la desconfianza entre ambas partes. Aunque este gesto puede interpretarse como un avance hacia la paz, la violencia sigue latente. La incertidumbre sobre la duración del alto el fuego y la presión internacional hacen que esta tregua sea solo un respiro en un conflicto que, desgraciadamente, parece lejos de resolverse.

Néstor Gozalbo Fortuny. Barcelona

Desprotección e incertidumbre

Cuando estoy a solas, suelo cuestionarme si mi vida sería mucho más fácil de haber tomado otras decisiones. Sospecho que esta inquietud es un mal plural, pues mi generación lidia con la desprotección y la incertidumbre sin saber cuánta parte de responsabilidad tenemos en el fracaso de nuestro ciclo vital. Hemos oído decir que la veintena es una etapa de interrogantes —”los ha habido siempre”, sí—. Nadie apostilla esta acepción. Cerca de la treintena, sin embargo, este puzle sigue peligrosamente incompleto. Sabemos las fichas que nos faltan y ya lo hemos revisado: no venían en la caja. El juego está defectuoso.

Teodoro Vallet Sánchez. Madrid

El círculo vicioso de la infelicidad

Parece haber cierto consenso sobre la relación existente entre la alteración de los hábitats naturales y el origen de la pandemia de covid-19. También es evidente que fue acabarse el confinamiento y surgir la necesidad imperiosa de recuperar el tiempo perdido, este frenesí general de movimiento al que asistimos que causa la exuberancia irracional de un mercado turístico a partir del cual se ha acelerado de manera endiablada el actual problema de la vivienda. Al final va a resultar cierto aquello de que toda la infelicidad del ser humano procede de que es incapaz de quedarse quieto en su habitación, como escribió el filósofo francés, Blaise Pascal.

Miguel Ángel Cuevas Cosío. Sancibrián (Cantabria)



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