_
_
_
_
Columna
Artículos estrictamente de opinión que responden al estilo propio del autor. Estos textos de opinión han de basarse en datos verificados y ser respetuosos con las personas aunque se critiquen sus actos. Todas las columnas de opinión de personas ajenas a la Redacción de EL PAÍS llevarán, tras la última línea, un pie de autor —por conocido que éste sea— donde se indique el cargo, título, militancia política (en su caso) u ocupación principal, o la que esté o estuvo relacionada con el tema abordado

Posguerra

Derrotamos la arrogancia militar de ETA, lo que no fue poco ni fácil, pero el paisaje aún tiene demasiados nubarrones oscuros

Fernando Savater
Varios periódicos vascos en mayo de 2018 anunciando el fin de ETA.
Varios periódicos vascos en mayo de 2018 anunciando el fin de ETA.javier hárnandez juantegui

Tras la muerte de un amigo que fue camarada de trincheras en muchas batallas necesarias, como Jose Mari Calleja para mí, es obligado repasar el resultado de aquella guerra, de lo ganado y lo perdido. Siempre hay muchos frentes y nunca se vence en todos. Es cierto que derrotamos la arrogancia militar de ETA, lo que no fue poco ni fácil, pero el paisaje aún tiene demasiados nubarrones oscuros. El objetivo político del terrorismo era el aniquilamiento cívico de quienes se opusieron resueltamente al separatismo y eso en parte les fue concedido como premio a su renuncia forzosa a las armas. Hoy, un nuevo Jose Mari Calleja nunca podría ser presentador de un informativo en ETB, donde prosperan tipos deleznables como Xabier Lapitz. Y en la UPV se niega el título de “emérito”, en otras ocasiones concedido casi automáticamente a cualquier profesor mediano, a figuras tan valiosas y valientes como Aurelio Arteta o ahora Francisco Llera, fundador del Departamento de Políticas y director del Euskobarómetro desde 1995. Dos académicos de méritos sobrados, pero, ay, también marcados a fuego por su clara denuncia del terrorismo separatista.

En el caso del profesor Llera son sus compañeros de departamento los que le han negado su anuencia, preceptiva para el nombramiento. El resultado de la votación merece grabarse en mármol: un voto a favor, dos en contra y 12 abstenciones. Es el tanteo oficial del marcador de la decencia en Euskadi, antes y ahora. Y no solo allí: quien quiera conocer otros casos del mismo virus debe leer Equidistantes exquisitos (Ediciones Hildy), de Antonio Robles. Comprendo que es una mala noticia, pero hay que seguir luchando. No nos permitimos ayer el miedo ni ahora debemos acunarnos en la esperanza, porque son solo ganas de descansar.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_