_
_
_
_
Columna
Artículos estrictamente de opinión que responden al estilo propio del autor. Estos textos de opinión han de basarse en datos verificados y ser respetuosos con las personas aunque se critiquen sus actos. Todas las columnas de opinión de personas ajenas a la Redacción de EL PAÍS llevarán, tras la última línea, un pie de autor —por conocido que éste sea— donde se indique el cargo, título, militancia política (en su caso) u ocupación principal, o la que esté o estuvo relacionada con el tema abordado

Los ciudadanos y los políticos

No parece que la ciudadanía, pese a su sobresalto, malestar y desacuerdos sea tan hipercrítica

Xavier Vidal-Folch
El lehendakari, Iñigo Urkullu.
El lehendakari, Iñigo Urkullu.MIKEL ARRAZOLA (Europa Press)

Cinco de las seis grandes decisiones adoptadas por el Gobierno durante la pandemia han recibido acerbas críticas políticas. Cinco de seis: 1) El decreto del estado de alarma, con la centralización de competencias y el confinamiento. 2) Las medidas económicas de urgencia para preservar empresas y proteger a los más vulnerables. 3) La paralización total de actividades mediante el confinamiento reforzado de Semana Santa. 4) Su posterior reversión. 5) La desescalada por fases.

La recepción de la sexta, la estrategia activista en favor de un Plan Marshall de reconstrucción europea financiado con eurobonos, aunque excelente por distintos grupos en el Parlamento de Estrasburgo, tampoco ha sido gloriosa en la escena doméstica.

Y sin embargo, no parece que la ciudadanía, pese a su sobresalto, malestar y desacuerdos sea tan hipercrítica. Un botón de muestra, al anunciarse la desescalada, mientras élites económicas y políticas se enconaban contra ese plan en el programa radiofónico Aquí amb Josep Cuní (SER), dos tercios de los oyentes mostraban su apoyo al mismo en la encuesta instantánea.

Haz que tu opinión importe, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Seguramente sintonizaban con el tipo de razonamiento —se llama ponderación—, del epidemiólogo Miguel Hernán, catedrático de esa especialidad (y uno de los asesores del Gobierno), quien el jueves declaraba a este diario: “Nadie sabe cuál es el buen camino, pero este parece bastante razonable”.

Pero si eso es así, o así parece ¿por qué hasta personajes políticos tan razonables como Íñigo Urkullu se sienten tentados a dejar solo, fané y descangallado al Gobierno a media partida contra el virus? Atención, hablamos de Urkullu, no de un saltataulells, no de un chisgarabís. Cierto que la centralización de algunas estrategias resultaba inesquivable. Y que los fallos en su ejecución no la desautorizan. Y que también ha servido para descentralizar, al otorgar más poder a las autonomías: nada menos que sobre los hospitales privados y los laboratorios...

Pero al transmitirse la idea de que la coordinación al más alto nivel implicaba mando-único-en-todo, se incentivaba la leña al mando único. Falla el mensaje. El método. La resurrección de la Conferencia de Presidentes es una noticia magnífica. Pero si cunde la sensación —o la realidad— de que no solamente es solo consultiva sino prescindible, y que no contribuye seriamente a forjar la voluntad del Estado, la buena noticia se degrada. Falta la evidencia de que, en torno a un mismo puente de mando cooperan muchos brazos, muchos mandos identificables. Y así.


Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_