¿Qué ha pasado en Alemania? Las elecciones en nueve gráficos esenciales
Un análisis con los datos clave, desde las posibles coaliciones al perfil del votante de extrema derecha
Las elecciones alemanas de este domingo se resolvieron sin sorpresas: los socialdemócratas se desplomaron, la ultraderecha dio un paso adelante y los conservadores consiguieron la victoria. A continuación, repasamos las claves y los datos esenciales de la elección.
¿Quién gobernará?
El conservador Friedrich Merz es el gran favorito para dirigir el próximo gobierno. La unión democristiana que lidera —con CDU y CSU—, fue la fuerza más votada y ahora buscará una fórmula de coalición. Tiene varias posibilidades, todavía inciertas.
Una vía asegurada es la gran coalición ampliada o “Kenia”: los conservadores suman mayoría con socialistas del SPD y los Verdes. El resto de opciones dependían de si la izquierda del BSW y los liberales del FDP acababan por acceder al Bundestag —para entrar se exige un 5% del voto nacional o tres nombramientos uninominales—.
Según el último escrutinio, ni liberales ni BSW entrarán a la cámara. En ese caso, según la proyección de la cadena pública ARD, parece que una gran coalición con CDU/CSU y SPD sí sumará escaños para alcanzar una mayoría.
Si BSW hubiese entrado a la cámara —por superar el 5% o ganar tres distritos—, entonces la gran coalición se habría quedado corta. A cambio, se hubiese abierto una segunda vía tripartita con el nuevo partido de izquierdas como alternativa a los Verdes.
La extrema derecha de AfD duplica sus apoyos, socialistas y liberales se desploman
Los resultados de este domingo señalan otro claro ganador además de los conservadores: Alternativa por Alemania (AfD) duplicó los apoyos que obtuvo hace cuatro años, llevándose el voto de uno de cada cinco electores.
Los principales perdedores fueron dos de los partidos del gobierno saliente. Los socialdemócratas, liderados por Olaf Scholz, perdieron más de un tercio de sus apoyos, cayendo del 26% al 16%, mientras que los liberales del FDP vieron reducirse su respaldo a menos de la mitad, pasando del 11% al 4,4%.
La caída de los socialdemócratas fue aprovechada por Die Linke, partido situado más a la izquierda, que creció del 5% al 9%, a pesar de haber sufrido la escisión de Por la Razón y la Justicia (BSW), que se encuentra cerca del 5% de los votos.
Tomando en cuenta todos estos movimientos, parece evidente que el electorado en Alemania se ha desplazado hacia la derecha: la suma de los votos de CDU/CSU y AfD pasó del 35% al 49% en cuatro años.
El SPD obtiene su peor resultado histórico
Hace cuatro años, los socialdemócratas recuperaron la cancillería alemana con un resultado relativamente corto (26% de los votos). Este domingo cayeron al 16% —el nivel más bajo en la historia del partido.
La popularidad del gobierno encabezado por Olaf Scholz se fue deteriorando durante su mandato, principalmente por el descontento generado por la crisis inflacionaria que golpeó a Europa—y especialmente a Alemania—tras el estallido de la guerra entre Rusia y Ucrania. La fragilidad del tripartito conformado por socialdemócratas, liberales y Verdes llevó a la convocatoria anticipada de estas elecciones, cuando la desaprobación del gobierno superaba el 70%, según YouGov.
La CSU arrasa en Baviera; AfD gana en Alemania del Este; socialistas y verdes resisten en ciudades
El mapa del voto refleja la persistente fractura entre las dos Alemanias. Alternativa por Alemania ganó en la mayor parte de la antigua Alemania del Este, mientras que los democristianos dominaron el resto del país.
En Baviera, la CSU arrasa con el 37% de los votos. Sus socios, los conservadores de la CDU, registraron alrededor del 30% de los apoyos en los estados de Renania del Norte-Westfalia, Renania-Palatinado, Hesse y Baja Sajonia. Por su parte, AfD superó el 35% en las regiones de Mecklemburgo-Pomerania Occidental, Sajonia, Turingia y Sajonia-Anhalt, todas pertenecientes a la antigua RDA.
AfD crece con votos de todos los partidos
El crecimiento de la formación ultraderechista se debe, en parte, a la migración de votantes de diversos partidos. Según el último sondeo de YouGov, un 19% de los votantes de AfD había votado en 2021 por los conservadores de CDU/CSU, un 8% provenía de los liberales y un 9% del SPD. Además, un 4% de los votantes de la ultraderecha indicó haber optado, hace cuatro años, por Die Linke, el partido más a la izquierda.
Quién ha votado a cada partido
AfD tiene un voto masculinizado, siguiendo un patrón que ya hemos observado en muchos países. Según los sondeos preelectorales de YouGov, el 24% de los hombres se habría decantado por la formación ultra (segunda fuerza), frente al 16% de las mujeres (tercera). En contraste, los partidos de izquierda—como BSW, Die Linke y los Verdes—acumulan un mayor apoyo entre las mujeres.
Además, se observan grandes diferencias según la edad. Los partidos tradicionales (CDU/CSU y SPD) tienden a ganar más apoyos conforme aumenta la edad. Los conservadores, en particular, pasan del 14% de intención de voto entre los jóvenes al 40% entre los mayores de 70 años. La formación de extrema derecha AfD muestra un perfil transversal y solo exhibe una relativa debilidad entre los jóvenes, quienes, en cambio, se decantan mayoritariamente por Die Linke, que fue la primera fuerza electoral entre los de 18 a 29 años, seguida de los Verdes.
Un último patrón a destacar es el éxito de AfD entre personas con menor nivel educativo: un 27% de este colectivo votó por la formación radical, frente al 19% de los universitarios. En cambio, los Verdes y los liberales incrementaron su apoyo entre aquellos con más formación.
Un voto superfragmentado
Durante décadas, la suma de votos entre socialdemócratas (SPD) y conservadores (CDU/CSU) superó el 70%. Sin embargo, en lo que va de siglo, los electorados en Alemania se han fragmentado, tanto por la izquierda (con el crecimiento de los verdes, Die Linke y su reciente escisión), como por la derecha (con la aparición de AfD). Las elecciones de este domingo apuntalan esta corriente: la suma de CDU/CSU y SPD no pasan del 45%, la cifra más baja en siete décadas.
Si hay un gobierno de coalición, se continuará una larguísima tradición
Con estos resultados, lo probable es que el próximo gobierno sea una nueva coalición, revalidando la tradición multicolor en Alemania. Desde 1949, de los 28 gabinetes que se han formado, el único gobierno en solitario fue el de Konrad Adenauer en los años cincuenta. El resto se configuraron como coaliciones.