Conflicto en Oriente Próximo: resumen del 13/01/2025

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El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, y el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, han conversado por teléfono sobre el estado de las negociaciones para una tregua entre Israel y Hamás en la franja de Gaza. La Casa Blanca ha informado de que Biden ha pedido un alto el fuego “inmediato” y ha resaltado la “necesidad de liberar a los rehenes y aumentar la ayuda humanitaria”,

Biden y Netanyahu han discutido los esfuerzos en curso para alcanzar un acuerdo para detener los combates en el enclave palestino y liberar a los 98 rehenes restantes retenidos allí. El asesor de seguridad nacional de Biden, Jake Sullivan, había dicho previamente que las partes estaban “muy, muy cerca” de llegar a un acuerdo, pero que aún tenían que cruzar la línea de meta.

Los dos líderes también han discutido “el cambio fundamental que se ha producido en las circunstancias regionales tras el acuerdo de alto el fuego en Líbano, la caída del régimen de El Assad en Siria y el debilitamiento del poder de Irán en la región”, detalla la Casa Blanca.

Funcionarios israelíes y palestinos han dicho desde el jueves que se han logrado algunos avances en las conversaciones indirectas entre Israel y el grupo militante Hamás, que se están llevando a cabo a Doha. “Todavía estamos decididos a usar cada día que tenemos en el cargo para hacer esto”, ha afirmado Sullivan, “y no estamos, ni por asomo, dejándolo de lado”.

Sullivan afirma que todavía hay una posibilidad de llegar a un acuerdo antes de que Biden deje el cargo, pero que también es posible que “Hamás, en particular, siga siendo intransigente”.

Sobre el terreno, el ejército israelí ha ordenado el desalojo de algunas zonas del campamento de refugiados de Nuseirat, en el centro de la Franja y ha matado al menos a 28 palestinos en las últimas horas en nuevos bombardeos lanzados contra Gaza, 17 de ellos en el norte del enclave, según fuentes locales. Además, al menos otras 89 han resultado heridas, según un informe del Ministerio de Sanidad del enclave, gobernado por Hamás.

Estos datos elevan el total de muertos desde el inicio de la guerra a 46.565, mientras que los heridos ascienden a 109.660. Estos datos no incluyen los 11.200 desaparecidos cuyos cuerpos no han sido trasladados a hospitales al encontrarse entre escombros o tirados en carreteras sin que los equipos de rescate puedan acceder a ellos, según las estimaciones del Ministerio gazatí de Sanidad.

Además, la Autoridad Nacional Palestina (ANP), que gobierna en partes reducidas de la Cisjordania ocupada, ha responsabilizado a Hamás de la situación “catastrófica” humanitaria que hay en la franja de Gaza. En un comunicado, la ANP considera que la milicia proporcionó “pretextos gratuitos” para que Israel llevara a cabo “la mayor guerra de exterminio” contra la población gazatí, tras sus ataques del 7 de octubre de 2023 en territorio israelí.

Según la Autoridad Palestina, Hamás también provocó “que se extendieran el hambre, la pobreza y la privación de las necesidades humanas más básicas”, además del “colapso del sistema de servicios básicos de educación, salud y otros”. Es la primera vez en más de un año de ofensiva israelí contra la Franja que la ANP culpa abiertamente a los islamistas del desastre humanitario en el enclave palestino.