El equipo de Kate Middleton prepara su reaparición pública en una misa el 31 de marzo

Cuando la Iglesia anglicana de Inglaterra y la Muy Leal Oposición de Su Majestad entran de lleno en el debate sobre la salud y el paradero de Kate Middleton, el revuelo adquiere categoría de asunto de Estado. “Creo que estamos obsesionados con las teorías de la conspiración”, ha dicho a Times Radio Justin Welby, el primado y líder espiritual de la Iglesia oficial de Inglaterra, cuya cabeza y Supremo Gobernador es el rey Carlos III. “Tenemos muy poco sentido respecto a la humanidad de aquellos que se ven atrapados en el foco de las noticias […] La gente debería poder enfermar, ser sometida a una operación o lo que sea, y vivir sus vidas en paz, sin que el resto les exija que tengan que probar algo día tras día. Es extremadamente enfermizo; cotilleo de pueblo pasado de moda que ahora se propaga por todo el mundo en cuestión de segundos”, ha denunciado Welby.

A su voz se ha sumado Keir Starmer, el líder de la oposición laborista y el político que, según todas las encuestas, se convertirá en el próximo primer ministro del Reino Unido antes de que finalice el año (las elecciones generales se celebrarán el próximo otoño, según la expectativa general). “Creo que debemos dejarla en paz”, ha dicho Starmer en la emisora Channel 5 cuando le han preguntado si sentía lástima por Kate Middleton. “Ha sido sometida a una operación difícil, y merece privacidad […] Deberíamos dejar de entrometernos en sus asuntos y dejarla en paz. Mi respuesta no es política, sino humana; es la respuesta de un padre y de un ser humano”, ha añadido Starmer.

Hasta el Gobierno británico ha salido en defensa de la princesa de Gales, después de conocer esta semana que el hospital London Clinic, donde Middleton fue operada a principios de año, investiga a tres miembros del personal, sospechosos de haber intentado acceder al historial médico de tan célebre enferma. “Hay reglas muy claras y estrictas respecto a la información de los pacientes que deben ser observadas”, ha dicho un portavoz del primer ministro, Rishi Sunak. “Creo que todos queremos apoyar a la princesa y a su esposo, el príncipe de Gales, y todos deseamos obviamente que se recupere lo más rápidamente posible”, ha añadido.

Planes de reaparición pública

El vídeo difundido el lunes por el tabloide The Sun, en el que se veía a Kate Middleton y Guillermo de Inglaterra de compras en una granja-tienda de Windsor, no acalla las especulaciones, rumores y teorías de la conspiración en torno a la princesa que inundan las redes sociales, como confiaba el equipo de comunicación del palacio de Kensington.

Aunque oficialmente se mantienen los planes de que Middleton no se reincorpore plenamente a sus actividades públicas hasta después del 17 de abril, cuando finalizarán las vacaciones escolares de Pascua en el Reino Unido, el personal de confianza de la princesa prepara una reaparición puntual que ayude a calmar las aguas. Sería el 31 de marzo, Domingo de Pascua, durante el servicio religioso que tradicionalmente atiende la familia real británica, según han anunciado varias publicaciones del Reino Unido, citando fuentes cercanas a la pareja. El palacio de Kensington —la residencia de los príncipes de Gales y el término con que se hace referencia a su equipo administrativo y de comunicación― no ha confirmado ni desmentido la posibilidad de esa reaparición.

Sigue toda la información internacional en Facebook y X, o en nuestra newsletter semanal.