El Tribunal de Estrasburgo reprocha a Polonia que no reconozca los derechos de las parejas del mismo sexo
Una sentencia considera que la falta de regulación para las uniones homosexuales viola el derecho a la vida privada y familiar y constituye una discriminación
Una sentencia del Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) ha reprochado a Polonia, que esta semana está en pleno cambio de Gobierno, que no garantice el reconocimiento y la protección de las relaciones entre personas del mismo sexo. La falta de regulación para las uniones homosexuales viola el derecho a la vida privada y a la vida familiar, y constituye una discriminación, según la resolución. El fallo es la respuesta a una demanda de cinco parejas homosexuales polacas que se dirigieron al Tribunal de Estrasburgo en 2017 y 2018 ante la imposibilidad de regularizar su relación en el país.
La decisión subraya que la ausencia de legislación que regule las uniones homosexuales, no necesariamente el matrimonio, viola el Convenio Europeo de Derechos Humanos, en particular el artículo 8 (derecho a la intimidad y a la vida familiar), en conjunción con el artículo 14 (prohibición de discriminación).
Las parejas del mismo sexo, señala la sentencia, no pueden “regular aspectos fundamentales de su vida en común, como los relativos a la propiedad, la manutención, la fiscalidad y la herencia”. En la mayoría de las situaciones, la relación de los demandantes “no tenía peso alguno ante las autoridades judiciales o administrativas”, según un comunicado de la institución.
El Tribunal de Estrasburgo tomó nota durante el proceso de las alegaciones de las partes y otros intervinientes que reseñaron “las actitudes cada vez más hostiles y homófobas” hacia la comunidad LGTBI mostradas por altos cargos del partido gobernante cuando se presentaron las demandas, incluidas las resoluciones de gobierno locales que declararon “zonas libres de ideología LGTBI”. El comunicado del tribunal también recuerda las declaraciones homófobas de uno de los actuales jueces del Tribunal Constitucional, un órgano politizado.
La formación gobernante a la que hace referencia el TEDH es el partido ultraconservador Ley y Justicia (PiS), que fracasó este lunes en su intento de revalidar su mandato. En las elecciones del pasado 15 de octubre, PiS resultó el partido más votado, pero no sumó la mayoría necesaria para forma Gobierno. La sentencia se ha hecho pública el mismo día en el que un nuevo Ejecutivo liberal, capitaneado por Donald Tusk, recibirá el voto de confianza del Sejm, la Cámara baja del Parlamento.
El acuerdo de coalición de Tusk, líder del partido de centroderecha Plataforma Cívica, con los democristianos y agrarios de Tercera Vía y los socialdemócratas de Lewica (Izquierda), no incluye derechos del movimiento LGTBI como las uniones del mismo sexo o la adopción. El nuevo primer ministro sí las prometió en campaña, y el nuevo ministro de Justicia y ex Defensor del Pueblo, Adam Bodnar, un reconocido activista de los derechos humanos, se ha unido en el pasado a las reivindicaciones del colectivo.
Organizaciones de defensa de los derechos LGTBI han celebrado la decisión y han invitado al nuevo Ejecutivo liberal, que está previsto que tome posesión mañana, a entablar un diálogo para cumplir con la sentencia del Tribunal de Estrasburgo.
El pasado 6 de diciembre, la mayoría parlamentaria del Sejm creó una nueva comisión para la igualdad de la comunidad LGTBI. “Habrá mucho trabajo, porque los últimos años se han centrado principalmente en el odio y el abuso de otras personas”, dijo el presidente, Krzysztof Smiszek.
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