Rafa Márquez y Julión Álvarez: dos estrellas mexicanas manchadas por el narcotráfico

La Oficina de Control de Bienes de Extranjeros del Departamento del Tesoro de Estados Unidos (OFAC) ha anunciado este martes que el futbolista mexicano Rafael Márquez y el cantante de música norteña, Julión Álvarez, están incluidos en la lista negra del Departamento de Tesoro de Estados Unidos que los vincula con el lavado de dinero del narcotráfico. Dos de las estrellas más internacionales del país —Márquez es el único mexicano en ganar una Champions League con el Barcelona; y Álvarez es un icono para los migrantes mexicanos en Estados Unidos— han quedado marcados para siempre con la huella más bochornosa para un mexicano: estar vinculados de cualquier forma a una organización criminal que siembra de cadáveres su tierra. 

Álvarez y Márquez son dos de los 21 mexicanos incluidos en la lista que ha dado a conocer el Departamento del Tesoro, la mayoría provenientes del Estado de Jalisco. Su inclusión implica sanciones inmediatas de Estados Unidos, como la cancelación de la visa y la congelación de todas las cuentas y propiedades en territorio estadounidense. Un golpe al hígado para los negocios que tienen ambos fuera de las fronteras mexicanas.

Por su parte, Márquez acudió esta tarde a las oficinas de la Procuraduría General de la República (Fiscalía) para declarar de forma voluntaria. Julión Álvarez, en un comunicado a través de su cuenta de Facebook, ha rechazado cualquier vinculación con el narco: "Lo poco o lo mucho que tengo me lo he ganado (...) Me he dedicado a hacer música, gracias a Dios no tengo la necesidad de muchas de las cosas que me están acusando". En ese mismo vídeo difundido en vivo desde la red social ha intentado desmarcarse de la trama especulando con que las acusaciones en su contra puedan ser "cuestiones de envidias, de celos".

Rafa Márquez es visto en México como una eminencia del fútbol. Su trayectoria la forjó como el primer y único defensor central en llegar al Barcelona, en alzar el trofeo de la Champions League en 2006, en llenar los huecos de éxito que había dejado Hugo Sánchez en su paso por el Real Madrid. El zaguero se mantiene como jugador activo en el Atlas de su país e incluso aún es internacional. Este día, Márquez no fue al entrenamiento. 

Márquez, nacido en Zamora, Michoacán, empezó a jugar en los equipos inferiores del Atlas instalados por el argentino Marcelo Bielsa. Con 17 años, el pequeño defensor central jugó sus primeros minutos con el equipo mayor y luego le convocaron para jugar en la selección absoluta de México. A partir de allí nadie detuvo al 'káiser'. Dos años después, alzó con la elástica del tri la Copa Confederaciones, el único gran torneo de la FIFA que ha ganado México.

El joven Márquez fue adiestrado en la posición por Claudio Suárez, uno de los jugadores históricos mexicanos. Tan pronto fue fichado por el Mónaco. Allí empezó a dar golpes de autoridad. Se ganó el brazalete de capitán y no había otro mandamás en México que él, el jugador número 4. El Barcelona le fichó en el 2003. De alguna forma, fue el embajador del Barcelona en México.

Sus siete años en el Barcelona conquistó cuatro Ligas, dos Champions, una Copa del Rey y tres Supercopas de España. Fue su época dorada. Después jugó un tiempo en los Red Bulls de Nueva York, algunas temporadas en el León. Regresó a Europa con el Hellas Verona de Italia. En su última aventura regresó a México con el Atlas.

Como internacional por México ha jugado cuatro mundiales (2002, 2006, 2010 y 2014) y ha anotado en tres. En los últimos años, pese a tener 38 años, ha sido el futbolista-asesor del seleccionador Juan Carlos Osorio. Otra de sus facetas ha sido la de líder sindical. Él junto con Carlos Salcido y Christian Giménez ha sentado las bases de un sindicato para futbolistas en México.

Las empresas de Rafa Márquez que han sido ligadas con el narco Raúl Flores son una escuela de fútbol, el Grupo Deportivo Márquez Pardo, el Grupo Deportivo Alaver, la Fundación Fútbol y Corazón, el Grupo Terapéutico Hormalral, el Grupo Nutricional Alhoma, Prosport & Health Imagen, Servicios Educativos y de Negocios y Grupo Terapéutico de Puerto Vallarta. Sus cuentas y propiedades en Estados Unidos serán congeladas, tampoco podrá jugar en los futuros amistosos en aquel territorio. 

Julión, el rey de la taquilla

Julio César Álvarez es el cantante de banda norteña —uno de los géneros más escuchados en todo el país— que más conciertos llena en México . Así se le conoce en el mundo artístico mexicano como El rey de la taquilla. No se le escapa un sold out. Precisamente, una de las empresas que el OFAC ha publicado en su lista negra vinculadas al artista es Ticket Boleto.

Álvarez nació en Chiapas, al sur de México, pero enseguida sintió devoción por ese tipo de música que se hacía en el norte, rápida como la metralla, que elogiaba tanto al amor como a los grandes capos de la droga con sus corridos. Todo a base de acordeón y tuba sinaloense. Y, de fondo, una voz que se desgañitaba para destacar sobre todos aquellos potentes sonidos de viento. Julión fue escalando poco a poco, colaborando con bandas como El Recodo, La MS, hasta crear la suya propia hace unos 10 años. A partir de ahí, Julión y su Norteño Banda, se convirtieron en un éxito: canciones como Así fue, Olvídame, Te hubieras ido antes o El amor de su vida, llegaron a ser lo más escuchado en las radios mexicanas. En 2015 se convirtió en el artista más reproducido en las plataformas digitales.

Además de dedicarse a la música, también se le ha dado bien la polémica. El año pasado hizo estas declaraciones en una entrevista y tuvo que pedir perdón varias veces por ello: "Lo que me gusta es que sean muy damitas. Estoy educado a la antigüita. Me agrada que les guste agarrar un trapeador [escoba] porque pueden estar hermosas y ser buenas para lo que sea, pero si no tienen ese detalle, pues para mí no sirven". Una confesión no tan extraordinaria de un cantante de música típica mexicana, con letras a menudo abiertamente machistas, pero que acabó costándole una reprobación masiva de un país donde el 63% de las mujeres declara haber sufrido algún tipo de abuso sexual, según una encuesta del Instituto Nacional de Estadística.

Las empresas de Julión Álvarez que han sido ligadas al narco son: JCAM Editora Musical, Noryban Productions y Ticket Boleto. Todas ellas tenían algún tipo de relación con el misterioso narco mexicano, Raúl Flores Hernández.