Mancera pide al Gobierno Federal que no “ahorque” a Ciudad de México

Miguel Ángel Mancera aprovechó este sábado la presentación del informe de Gobierno, la hoja de ruta de su quinto año al frente Ciudad de México, para redoblar sus críticas a las últimas medidas económicas del Ejecutivo de Peña Nieto. El proyecto de cuentas públicas para 2017, presentado la semana pasada, asestó un duro recorte al grueso de las partidas presupuestarias dedicadas a los Estados, lo que según Mancera supone un estrangulamiento dramático para la capital.

“Quiero hacer un llamado respetuoso pero enérgico al Gobierno Federal y también a la Cámara de Diputados para que no se ahorque a la Ciudad de México”, dijo el mandatario desde la tribuna del congreso local. La cúpula de PRD —la izquierda tradicional mexicana—, incluyendo al propio Gobernador, ya salieron a la semana pasada a la palestra para descalificar el tajo presupuestario. Mancera dirigió un afilado dardo ad nominen contra el nuevo responsable económico, José Antonio Meade. Un choque frontal que muchos analistas interpretaron como un distanciamiento intencionado con el Gobierno de cara a la posible postulación del ahora jefe capitalino como candidato presidencial dentro de dos años.

El tono del reproche ha sido esta vez más atenuando. A dos sillas de distancia, el secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong —otro de los nombres que sobrevuelan las quinielas para la carrera presidencial— asistió como invitado a la hora larga de discurso. El motivo oficial de su participación era formalizar un acuerdo entre la policía federal y la capitalina.

La capital asume el mayor recorte en términos totales entre todas las entidades

Su presencia, sin embargo, sirvió como receptáculo para los mensajes de Mancera. “Quiero pedir que se respete el acuerdo del Fondo de Capitalidad, que no se olvide que los proyectos de este fondo se traducen en beneficios de millones y millones de mexicanas y mexicanos”. Esta partida -4.000 millones de pesos- fue concedida por primera vez a Ciudad de México en 2014 y su lógica es una compensación por los gastos que asume la capital por su condición de sede política y administrativa de los poderes federales. La previsión para el año que viene es eliminarla por completo.

El ajuste, tercero consecutivo en los presupuestos federales, ha sido justificado por el fuerte impacto en las finanzas mexicanas del derrumbe de los precios del petróleo y las turbulencias en los mercados internacionales. Son casi 240.000 millones de reducción para el año que viene, equivalente al 1,2% del PIB.

La capital verá mermados sus ingresos en 72.000 millones, el mayor recorte en términos totales entre todas las entidades, según los cálculos del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP). La foto cambia sin embargo al analizarla con proporcionalidad. Ciudad de México es quien más recibe, más de un tercio del total, y su tijeretazo, un 5,2%, es menor que la reducción media estatal: 6,1%.

Otro de los focos rojos para el Gobierno capitalino es el Fondo Metropolitano, destinado a hidratar económicamente las zonas conurbadas de la capital, las más deprimidas y pobladas. El recorte es casi del 70%, para dejar los fondos en 3.240 millones de pesos.