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El eclipse español

Lluís Bassets

Atrás queda una época breve y excepcional. España ha regresado adonde solía, a la irrelevancia; a una ausencia de la escena internacional a la que se había habituado durante los últimos tres siglos. Después de unos años en que los españoles eran el perejil de todas las salsas —construcción europea, Oriente Próximo, desarme nuclear de Irán…—, de pronto se han esfumado. El último y más significativo de los mutis es la resolución del contencioso con un país tan próximo como Cuba vía Washington, París o Bruselas, sin que Madrid haya sido el punto de salida ni de llegada de gestión relevante alguna.

Dos diplomáticos de primerísimo nivel como Jorge Dezcallar y Francisco Villar nos dan ahora testimonio escrito y bien documentado de la evolución de la política exterior de la democracia que consiguió sacar a España del aislamiento franquista hasta situarla de nuevo en el corazón del paisaje internacional y también de los errores que han precedido a la irrelevancia y la actitud ausente a la que hoy ha llegado con Rajoy.

Dezcallar ha sido embajador en la plaza más antigua (Vaticano), la más sensible (Rabat) y la más importante (Washington), pero fue como zar de los espías, primero en el Cesid y luego como primer director del CNI, donde adquirió mayor relevancia polémica e incluso noticiosa por sus desencuentros con Aznar tras los atentados de Atocha. Su aportación pertenece a un género que debiera ser una parte más, la final, del servicio público, como es convertir la experiencia en memoria y además amena e instructiva, deber que cumple de sobra y con elegancia, a diferencia del silencio o la torpeza egotista de tantos otros.



No le anda a la zaga Francisco Villar, embajador en París, Lisboa y Naciones Unidas, aunque en su caso usa el ensayo, para volcar su experiencia en la construcción de la política internacional de la democracia española desde sus cargos en Exteriores bajo la presidencia de Felipe González. Es una narración histórica, sistemática y bien estructurada, al hilo de la transición exterior, que culmina en 1988, cuando “España vuelve a estar en su sitio” y puede ya desplegarse como “país influyente”, al menos hasta 2002, a mitad de la segunda presidencia de Aznar, cuando se produce “la quiebra de casi todos los consensos en política exterior” y empieza el declive.

Española es la perspectiva de ambos, de forma que su contribución al declinismo actual es también española. Pero la novedad no enunciada, que en ambos libros se lee al trasluz, es que por vez primera no es España la que se hunde sola porque va a contracorriente del resto de Europa, como era lo habitual en los últimos siglos, sino porque responde al mismo movimiento que está resquebrajando a la Unión Europea y desoccidentalizando nuestro mundo. Magro consuelo, ciertamente.

(La Transición exterior de España. Francisco Villar. Marcial Pons. Madrid, 2016. 270 páginas. 25 euros

Valió la pena. Jorge Dezcallar. Península. Barcelona, 2015. 400 páginas. 19,90 euros)

Comentarios

Tras varios siglos de vivir separados de todas las corrientes principales de Europa (Reforma, Ilustración y florecimiento de las Ciencias Naturales, Revolución Industrial) es lógico que estemos separados. Con Polonia pasa algo parecido, con Ucraina también. Además, tampoco tenemos armas nucleares y económicamente vivimos del turismo y la demanda interna y la construcción y no de la innovación, lógico que no asumamos liderazgo. En todo caso, si esos fueran todos los problemas de la presidencia de Rajoy, sería una maravilla. Pero Mariano el "parao" tiene problemas y defectos mucho mayores.
Si solo fuera el liderazgo lo que Europa no tiene, fuera maravilloso. Ahora hasta Obama nos acusa de vividores, (free riders no traduce a oportunistas, como Bassets dice, sino a eso: aprovechado, aprovechador, arribista, arrimado, arrimón, vividor, chulo como dice el diccionario. Es peyorativo en inglés.) Lo peor es que no nos molesta o insulta. El marxista vividor nos considera vividores. Eso es ser vividor al cuadrado. Claro que debemos reconocer que "la culpa no está en nosotros, sino en las estrellas". Que nosotros "tratamos", pero las cosas nos salen... socialistas. ¿Cuántos años más seguiremos soñando que el socialismo funciona? Hemos visto caer a la URSS, no fue gran sorpresa, pero también vimos caer a ALEMANIA del Este, comunista pero Alemania de todas maneras. Mientras sigamos haciendo "lógica incontrovertible" como la de "al capitalismo ya no sirve ni para Estado Unidos" que es "verdad" solo porque la dice un dictador que tiene a su isla muerta de hambre "porque el comunismo funciona mejor" no tenemos futuro ni por accidente. Cuando defendemos a los perdedores, porque en la realidad hay ganadores y perdedores (y que nos duela, somos los perdedores), nos condenamos a seguir siempre de perdedores, y seguiremos viviendo entre los restos del Imperio de cuando no eramos irrelevantes e ineptos. Sé que es demasiado pedir que aceptemos que el pensamiento de libre-mercado es superior al socialismo, pero pido que no seamos tan ciegos y anquilosados que seamos capaces de mejorar. El mundo nos deja atrás a pasos agigantados. Es hoy o nunca. La Imperial España, tierra de valientes conquistadores capaces de perseguir al Inca por montañas y laderas por años, es ahora incapaz de formar gobierno. ¿Y no somos de dar lástima?
SUMAN ya 34 los muertos en Bruselas!! Esta Yihad también es parte de la herencia de Husein Obama y sus colegas pusilánimes europeos. En Bégica no se puede detener a nadie entre la 1 y las 5 de la madrugada, ni siquiera a terroristas. Faltaría mas! hay que dejarlos descansar! respetar su sueño! para que puedan por la mañana salir a combatir con mas fuerza por la ''causa''.¿Es ésta la politíca anti terrorista europea? Vaya! Siga Europa arrodillada ante el islam, que Eurabia está a un paso!
SIEMPRE se ha dicho en la España moderna: ''No hay que inventar nada, sólo hay que copiar''. Pues eso! Copiemos! ¿Por donde van los países que triunfan hoy en el mundo? Vayamos por ahí, pues! Ciertamente, no van por la senda del ''Estado del bienestar'', sino por la del ''Estado del Currar''. No van por ''todo atado y bien controlado'' sino por ''todo liberado''. No van por ''solidaridad para todos'' sino por ''Que cada palo aguante su vela''. ''Cada uno tendrá que hacerse cargo de su vida y de su entorno'' dijeron el Premier y el Rey de la Holanda ex progre. Pues eso! Lástima que salió en la letra pequeña, nadie se quiere enterar!! Y así nos va!Y ya que España se hunde, separémonos de ella! así nos hundimos antes!
Sr. Bassets, al hilo de su comentario.Por qué pasa esto?Quizás porqué España aún es un estado invertebrado.¿Me lo parece a mí, o tambien otras personas opinan lo mismo?En Europa, la derecha y la izquierda pugnan por vencer en las urnas y establecer su programa político, en término sociales , económicos. Hay rivalidad dentro de un espacio acotado de respeto a las normas que se han dado en el interior de cada país, y que ya sólo cuestionan los partidos xenófobos de extrema derecha, o los esencialistas de extrema izquierda.En España, la derecha y la izquierda pugnan por vencer en las urnas y para ello es válido el acoso y derribo del partido rival, puesto que aún no se ha tapado la zanja que divide a los españoles "de los nuestros" de los españoles "de los otros". El cuestionamiento de la estructura misma del estado no és monopolio de los extremos. Tanto el centro-derecha, como el centro-izquierda, aún están en la pantalla de definir qué es España, y delimitar los límites.En otras palabras, todavía sigue vigente el aviso de A.Machado : "Españolito que vienes al mundo / una de las dos Españas ha de helarte el corazón."(La ironía es que según algunos nacionalistas españoles, España es la nación más antigua de Europa. Pues bien, resulta que aún está en fase "construcción".)
Leo por primera vez la palabra DESOCCIDENTALIZACION aunque supongo no es la primera vez que se utiliza pues segun mi opinion hace ya bastante tiempo que nos estamos desoccidentalizando los europeos con esa politica buenista, la multiculturalidad y otras monsergas para ocultar que hemos dejado de defender nuestras raices, nuestros valores y nuestra forma de vida, vuelvo a repetir lo que dijo hace un tiempo el primer ministro de Australia: Nosotros no los hemos llamado si vienen deben integrarse a nuestra forma de vida y aceptar nuestros valores y uno de ellos es la libertad religiosa mientras no se transforme en fanatismo agresivoJose Luis Espargebra Meco un español desde Buenos Aires
Será que los Europeos no han analizado a fondo el fenómeno árabe o islamita? Será que los Europeos no quieren entender que llevaban años (tal vez siglos?), repartiendo y delimitando países y naciones a su antojo y que ahora ese desaguisado (con todos esos migrantes incluidos) les está diciendo ya es hora de arreglar lo que dejaron mal hecho?

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Sobre la firma

Lluís Bassets
Escribe en EL PAÍS columnas y análisis sobre política, especialmente internacional. Ha escrito, entre otros, ‘El año de la Revolución' (Taurus), sobre las revueltas árabes, ‘La gran vergüenza. Ascenso y caída del mito de Jordi Pujol’ (Península) y un dietario pandémico y confinado con el título de ‘Les ciutats interiors’ (Galaxia Gutemberg).

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