La policía iraní requisa ropa con las banderas de EEUU y el Reino Unido
Un responsable amenaza con el cierre a las tiendas que vendan prendas con esas enseñas
Las autoridades iraníes no están dispuestas a que las banderas de Estados Unidos y el Reino Unido se pongan de moda en su país. Así que la policía ha optado por incautarse de las camisetas y otras prendas con esas enseñas que al parecer habían llegado al mercado, además de detener a sus distribuidores, según ha informado este martes la agencia Isna. No está claro hasta qué punto eran populares, pero el control de la vestimenta es uno de los terrenos de batalla favoritos de los ultraconservadores.
En las últimas semanas los agentes habían recibido información de que algunas tiendas estaban vendiendo “ropa con las banderas estadounidense y británica, además de con diseños satánicos”, ha explicado el jefe del cuerpo en Teherán, el general Hosein Sajedinia. El alto mando no ha detallado en qué consisten los “diseños satánicos”, pero en el pasado se han calificado así los que hacían referencia a grupos de rock&roll y música underground.
“Esta mañana nos hemos incautado de esa ropa y detenido a los principales distribuidores”, ha declarado Sajedinia, sin precisar el número de afectados ni las cantidades aprehendidas. El responsable también ha anunciado que van a clausurar las tiendas que desoigan la advertencia y continúen vendiendo prendas de ese tipo a pesar de que “los teheraníes son poco dados a comprar ese tipo de prendas”, lo que parece cuestionar la operación.
Irán y Estados Unidos no mantienen relaciones diplomáticas desde 1980 a consecuencia del asalto a la Embajada norteamericana en Teherán. A pesar del giro que ha supuesto el acuerdo nuclear alcanzado el pasado 14 de julio, cuya negociación sentó a la mesa durante días a los jefes de ambas diplomacias, el restablecimiento de lazos aún resulta controvertido. En el caso del Reino Unido, aunque las embajadas se reabrieron hace diez días, el recelo iraní también perdura. En cualquier caso requisar las camisetas que lleven las respectivas banderas parece excesivo.
Desde el acuerdo, los iraníes se han mostrado esperanzados de que la distensión con Occidente ponga fin a las sanciones que castigan su economía y les abra las puertas al mundo. Aunque es pronto para hablar de cambios, muchos han notado una “relajación del ambiente”. Sin embargo, los ultraconservadores, que ven con recelo el pacto, no bajan la guardia y buscan cualquier excusa para demostrar su tesis de que todo es una trampa para invadir culturalmente su país.
Desde poco después de la revolución de 1979, los sectores más intransigentes del régimen han tratado de asegurarse el control social a través, entre otros, de una vestimenta sancionada como “islámica”. La imposición del pañuelo a las mujeres y la prohibición de la corbata a los hombres son las restricciones más conocidas, pero también censuran los pantalones cortos y las camisetas de manga corta (incluso en los hombres), las prendas de colores brillantes, el maquillaje y el excesivo adorno en general. En sus momentos de mayor auge incluso intentaron dictar los cortes de pelo permisibles, y prohibieron que la televisión estatal difundiera recetas de platos extranjeros.
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