La policía cree que fue “un grupo” el que perpetró el atentado de Bangkok

Dos días después de la explosión que causó al menos 20 muertos y más de 100 heridos en el corazón de Bangkok, todavía planean muchos interrogantes sobre quién podría detrás del atentado. La policía tailandesa ha apuntado este miércoles la posibilidad de que el autor se trate de un grupo y no un solo individuo. "No sospechamos de una persona, sospechamos de varias. Creemos que hay tailandeses implicados, pero no estamos diciendo que sean solo tailandeses o extranjeros", ha apuntado el jefe de la policía, Somyot Pumpanmuang, en una rueda de prensa.

Por el momento nadie ha reivindicado el ataque y se barajan muchas posibles opciones; desde opositores al Gobierno militar, terroristas internacionales o insurgentes del sur de Tailandia. Una idea que descartó este martes el jefe del Ejército, Udomdej Sitabutr, porque el atentado “no coincide” con las tácticas utilizadas por los separatistas, que luchan desde hace más de una década y nunca antes habían atacado en la capital tailandesa.

Este miércoles, la policía ha emitido un retrato robot de un joven que fue grabado por las cámaras de seguridad mientras ocultaba una mochila que abandonó en el lugar de los hechos y podría tener en su interior la bomba que provocó la tragedia.

Las autoridades, que aún desconocen la nacionalidad del principal sospechoso o si este aún se encuentra en el país, han emitido una orden de búsqueda y captura, y una recompensa de un millón de bahts (unos 25.400 euros) por informaciones que lleven a su detención. "Vamos a pedir una orden de arresto basado en el boceto de las cámaras de seguridad", ha dicho el portavoz de la policía Prawuth Thawornsiri esta tarde. “Le acusaremos de provocar una explosión y un asesinato premeditado”.

Las primeras investigaciones señalan que la bomba de fabricación casera, cargada con entre 3 y 5 kilos de dinamita y metralla, pretendía causar el mayor número de víctimas posibles, según la versión oficial, informa Efe.

Una segunda bomba estalló este martes cerca de un embarcadero donde confluyen varios servicios de transporte público y es muy transitada también por turistas. La explosión no causó víctimas ni daños materiales puesto que el artefacto cayó en el río, pero “si no hubiera caído en el agua con toda probabilidad habría causado víctimas", señalaron fuentes policiales. El jefe de la Policía ha indicado que todavía no está claro si ambos incidentes están relacionados.

El altar hinduista donde detonó la bomba el pasado lunes ha reabierto hoy al público y los coloridos puestos de vendedores locales de comida para los espíritus y coronas de flores han vuelto a rodear el santuario. Rosas, postales y velas han sido colocadas a pocos metros en recuerdo a los fallecidos.

Las víctimas mortales identificadas son seis tailandeses, cuatro malasios, tres chinos, dos ciudadanos hongkoneses, un indonesio, un singapurés y una británica. Al menos 123 personas resultaron heridas y varias de ellas permanecen en estado crítico.