Asesinan de un tiro a un opositor tayiko en Estambul

El empresario Umarali Kuvvatov, ferviente opositor al autoritario presidente de Tayikistán y reclamado por las autoridades de Dushambé, ha sido asesinado en Estambul. Los hechos ocurrieron la noche del jueves, cuando Kuvvatov paseaba por el barrio estambulí de Fatih y un desconocido se le acercó para descerrajar un tiro en su cabeza, después de lo cual huyó. La unidad antiterrorista de la Policía turca se ha hecho cargo de la investigación, según información de los medios locales.

Como otros oligarcas surgidos en el espacio postsoviético, Kuvvatov (47 años) hizo fortuna gracias a sus lazos con el poder. En concreto con Shamsullo Sojibov —yerno del presidente y hombre fuerte de Tayikistán, Emomalí Rajmón—, junto al que suministraba combustible a las tropas de la OTAN estacionadas en Afganistán. Sin embargo, en verano de 2012, Sojibov se enemistó con Kuvvatov y le despojó de sus acciones en la compañía conjunta, así que este decidió abandonar el país temiendo que la disputa empresarial se convirtiese en arresto.

Exiliado en Moscú, Kuvvatov anunció la fundación de un nuevo movimiento político, llamado Grupo 24, y comenzó a criticar la forma en que Rajmón —“el verdadero Satán”— controla el país centroasiático, como si fuese “un negocio familiar”. Gracias a su habilidad en las redes sociales, el empresario transformado en opositor se convirtió en un verdadero incordio para las autoridades tayikas, que desde entonces no cejaron en su persecución, tal y como ha denunciado la Asociación de Derechos Humanos para Asia Central (AHRCA). Finalmente, Kuvvatov se instaló en 2013 en Turquía, tras una breve estancia en Dubai.

Su movimiento fue declarado “organización extremista” por el Tribunal Supremo de Tayikistán el pasado mes de octubre y Dushambé cursó a Turquía una orden de extradición sobre Kuvvatov bajo los cargos de incitar a disturbios, extremismo y delitos económicos. El empresario tayiko fue detenido durante varias semanas, pero finalmente las autoridades turcas se negaron a proceder con la extradición.

Pese a las críticas por su autoritarismo, Rajmón ha conseguido sobrevivir desde 1992 al frente del país, protegido por Moscú, pero también apoyándose en la OTAN dada la estratégica situación de Tayikistán. El presidente ha ido ganando elección tras elección —que la oposición y organismos internacionales consideran amañadas— con un rango de votos que va desde el 60% hasta el 97%. Precisamente, el pasado domingo se celebraron elecciones parlamentarias en Tayikistán, en las que resultó vencedor el oficialista Partido Democrático del Pueblo, con el 65,2% de los sufragios, pero ni el Partido Comunista ni el Partido del Renacimiento Islámico —tradicionalmente las dos principales formaciones de la oposición— recibieron escaños, aunque sí lo hicieron otros tres pequeños partidos hasta ahora exentos de la asamblea. El líder comunista Shodi Shabdolov tachó los comicios de “farsa” y los observadores de la OSCE y el Parlamento Europeo denunciaron numerosos fraudes, tanto en la campaña electoral como pucherazos durante el recuento de las papeletas.

Kuvvarov no es el primer disidente de los estados exsoviéticos asesinado en Estambul. Abdulá Bujari, un predicador musulmán y opositor uzbeko, fue asesinado con varios disparos a quemarropa el pasado diciembre. Algo que llevó a uno de los principales líderes de la oposición de Uzbekistán, Muhammad Salih, también exiliado en Turquía a extremar sus medidas de seguridad.

Cuatro destacados islamistas chechenos fueron también ejecutados en las calles de Estambul entre 2009 y 2011 en asesinatos en los que se cree que estuvieron implicados los servicios secretos rusos.