Entrevista con Juan Arias

El periodista y columnista de EL PAÍS, excorresponsal en Italia y El Vaticano, responde a las preguntas de los lectores

1Alfredo R.S.29/09/2014 04:07:44

Hola Juan, voy a disfrazar mi enhorabuena por tu trabajo con una pregunta, me parece que el momento político de Brasil es complicado y sin un político que traiga esperanzas claras, qué te parece a ti? Gracias Juan Arias.

Es cierto que Brasil está en un momento delicado, pero al mismo tiempo positivo porque nunca la sociedad aquí ha estado más motivada, viva y exigente. Presciendiendo de los gustos de las ideas de cada uno, los tres candidatos más votados son personas dignas, democráticas y progresistas.

2Jose Alarcon29/09/2014 04:12:41

Los brasileños tenemos dificuldades para vernos como latinoamericanos. ¿Cómo podríamos mirar más hacia nuestro continente?

Es un problema complejo sobre el que ya he escrito mucho en mis columnas. Los brasileños se sienten brasileños y poco más. Tuvieron siempre vocación de imperio. Estoy sin embargo convencido de que Brasil se queda incompleto si pierde sus raíces del continente. Si del mapa de América Latina quitamos a Brasil se queda una figura feísima. Es simbólico.

3Alysson29/09/2014 04:20:40

¿Ahora cambiaría Brasil por el Vaticano? ¿Qué es lo que más y menos le gusta del carácter brasileño?

No. Brasil es el país que he escogido para vivir definitivamente. Me duelen sus problemas, la indiferencia ante los dramas que vive la gente de cierta clase política, pero me encanta la humanidad y el calor brasileño. Llevo aquí años y nunca me he sentido extranjero. Brasil es un país muy rico y creativo.

4Anónimo29/09/2014 04:24:48

¿Usted se considera imparcial? ¿O tiene predilección por Lula, a quien nunca hace críticas? ¿De verdad cree que millones han salido de la pobreza en un país con el PIB estancado?

Imparciales son solo los muertos o los robots. Como analista político intento entender lo que vive la sociedad frente a la política. No se trata de criticar o alabar a nadie. He criticado a Lula con motivo del caso de corrupción del 'mensalão' y he reconocido también su gran contribución para que los pobres de Brasil salieran a la luz y fueran ciudadanos con nombre, apellido, dirección y hasta tarjeta de crédito.

5Diego Amarante29/09/2014 04:28:19

¿La alquimia de Alckmin (gobernador de São Paulo) no se sustenta en gran parte por la simpatía de una sección considerable de la prensa, que da poco eco a las sospechas de corrupción de su Gobierno y trata la crisis de abastecimiento de agua como un problema climático y no de planificación y gestión?

Un hecho es cierto: Alckmin es hoy, con su % de consenso, la envidia de tantos otros políticos. No puede creer que los millones de ciudadanos de São Paulo no estén informados sobre un político que lleva décadas en la vida pública. ¿Por qué, por ejemplo, el candidato (del PT) Padilla no consigue convencer ni siquiera con la bendición poderosa de Lula? A mi no me gusta pensar que los ciudadanos brasileños siguen con los ojos vendados. Brasil ya ha despertado.

6Anónimo29/09/2014 04:47:34

Le falta ante todo cambiar su política exterior, algo esencial para cualquier país y más para Brasil. Este país fue siempre admirado por tener una diplomacia muy preparada, con gran independencia, de Estado, capaz de dialogar con todos. Me temo que en ese punto, hace falta un cambio y los tres candidatos deberían ser más claros sobre el tema. Brasil se está jugando mucho de su prestigio ya adquirido en este campo.

7Professor7929/09/2014 04:48:08

Buenos días. Soy brasileño y profesor universitario en Barcelona. Sigo a diario EL PAÍS en portugués y ya he leído varios reportajes suyos. Me gusta la manera en la que retrata Brasil, principalmente lo encantador y lo destructivo que puede ser vivir en Brasil. Me gustaría saber si usted ha tenido la oportunidad de vivir en el sur del país y conocer un poco la realidad fuera del circuito São Paulo - Río de Janeiro.

Cuando llegué a Brasil lo primero que hice fue recorrerme el país, que me admiró por su gran riqueza y complejidad. Brasil es de verdad un continente que además sabe vivir en paz sin vocación de desgarro. Recuerdo la impresión que me causó, por ejemplo, Belem con su mercado Ver-O-Peso casi fantasmal, con el sabor de Amazonia y su precioso teatro totalmente europeo.

8GuidoD29/09/2014 04:54:47

¿Cuál es tu opinión sobre Marina Silva?

Creo que es una mujer que cree en lo que dice, auténtica, que ha dedicado una vida con gran rigor ético a defender sus ideas en la defendsa de nuestro maltratado planeta y que busca una regeneración de la forma de hacer política que hoy esta en crisis no sólo en Brasil sino en todos los países democráticos. Es una política culta, lectora, que aprendió en sus carnes lo que es el hambre, la discriminación y los prejuicios y que cree en la necesidad de una mayor particpación de la sociedad en las decisiones que nos atañen a todos. Guste o no, Marina es un ejemplo de superación personal. Si llegara a la presidencia creo, sin embargo, que encontrará una oposición durísima por parte de los adalides de la vieja política que ven con cierto miedo su revolución.

9Gabriel29/09/2014 05:00:10

He notado desde hace unos años un claro amarillismo, ultranacionalismo y animadversión en general de la prensa y TV brasileñas contra España (por ejemplo en la Copa Confederaciones, el assunto del racismo de Daniel Alves, deportaciones en el pasado en Barajas, etc...). ¿Qué opina al respecto?

Hola Gabriel, es cierto que de vez en cuando existe ese amarillismo y una cierta intolerancia, pero en general, aunque a veces nos cueste aceptarlo, creo que a los españoles les encanta Brasil y los brasileños y no solo el fútbol y las garotas de Ipanema, sino la pujanza de este país, su creatividad y sus deseos de salir del túnel de atraso para dar el salto a la modernidad. Y, respecto a los brasileños, no creo que odien a los españoles aunque a veces sé que nos ven un poco arrogantes. Cada vez que un amigo brasileño vuelve de visitar a España, habla siempre de lo bien que lo pasó allí. Es una pena que no existe un mayor flujo de turismo mutuo para conocernos mejor. Es que Brasil es ya más caro que Estados Unidos o Europa.

10burch192729/09/2014 05:17:06

Por qué los candidatos a la presidencia de Brasil hablan casi poco o nada sobre su política exterior y derechos humanos en Sudamérica?

Publiqué ya un artículo en que explicaba que la política exterior era la gran 'cenicienta' en los programas de los tres candidatos. Es una laguna grave que quizás se deba a ese prejuicio de que ciertos temas no interesan al gran público y por tanto no dan votos. Es un gran error. Junto con el de Economía, el ministro de Asuntos Exteriores suele ser la gran apuesta en los gobiernos democráticos. Para Brasil es quizás más importante por la influencia que tiene en las relaciones con todo el continente latinoamericano y que está relacionado con el tema de los derechos humanos. Hoy existe un vacío de dicha política exterior que a la larga podría perjudicar a Brasil.

11boro b l29/09/2014 06:01:54

Juan: en primer lugar mostrarle mi admiración y respeto por su trabajo. Mi pregunta es ¿el Papa Francisco significa un cambio profundo en la Iglesia Católica? ¿O es más bien una anécdota? Se lo digo porque hay quien dice que no se ha apartado ni un milímetro de la doctrina "oficial" de la Iglesia y que todo se queda en declaraciones con buena intención para parecer que hay movimiento pero que todo se queda en el mismo lugar. Muchísimas gracias

He conocido a siete papas y creo que Francisco es el que más se está separando del aparato de poder acumulado en el Vaticano y el que más cercano está al cristianismo primitivo. Está volviendo a las fuentes. Ha quebrado ya muchos tabús dentro del aparato de la Curia Romana; da ejemplo con su vida; exige a la Iglesia estar del lado de los pobres y ha abierto un diálogo con las bases. Todo ello dará fruto más tarde. Es un papa que cree y practica lo que predica. No es poco, ¿verdad?

12van29/09/2014 06:02:56

¿Quién va ganar las elecciones, Marina o Dilma?

No soy profeta. Por lo general en todos los países democráticos en que existe la reelección es casi seguro que gana el candidato del Gobierno. Tiene cosas que presentar, una máquina poderosa y muchos más medios económicos. Y las campañas gastan mucho en propaganda y márketing. En ese sentido, debería ganarlas Dilma. Sin embargo no es la primera vez que las urnas dan sorpresas y desmienten sondeos. Y Brasil vive un momento muy especial. Lo importante es que gane quien gane, planee un futuro mejor para este país.