El Gobierno de Tailandia disuelve el Parlamento ante las protestas
La primera ministra convoca elecciones dentro de 60 días. La oposición se opone a que continúe en el poder hasta los comicios
El Gobierno de Tailandia ha anunciado este lunes la disolución del Parlamento y la celebración de elecciones generales dentro de 60 días con el objetivo de atenuar las protestas antigubernamentales previstas. "Después de consultarlo con varias partes, he enviado el decreto real para pedir la disolución del Parlamento", indicó la primera ministra, Yingluck Shinawatra, durante un discurso emitido por televisión.
"Con este escenario, cuando hay muchas personas de diferentes grupos que se oponen al Gobierno, el mejor camino es devolver el poder a los tailandeses y celebrar elecciones", indicó la primera ministra al pedir "que los tailandeses decidan".
El Partido Demócrata, que el día anterior decidió abandonar en bloque sus asientos en el Parlamento y este lunes se unió a las protestas en las calles de Bangkok, comentó que no aceptarán a Yingluck como regente hasta la celebración de elecciones.
Al menos nueve columnas de manifestantes partieron de varios campamentos esparcidos por Bangkok en un día que los antigubernamentales han bautizado como la "batalla final" contra la corrupción del "régimen Thaksin".
Tailandia arrastra una grave crisis política desde 2006 con frecuentes manifestaciones y protestas
Entre los planes de los antigubernamentales no se concibe acudir a las urnas bajo el actual modelo de elecciones, que denuncian está viciado por la compra de votos y en un escenario en el que sería casi segura su derrota.
La principal demanda de los antigubernamentales es la de invocar el artículo 7 de la Constitución para que el rey de Tailandia, el octogenario Bhumibol Adulyadej, designe al próximo jefe del Gobierno sin pasar por las urnas.
Este "consejo popular" no electo acometería una serie de reformas políticas, como la descentralización del poder del Estado y la reforma de la Policía, entre otras, antes de volver a convocar un referendo que devolviera la iniciativa a la voluntad popular.
Los grupos que lideran las movilizaciones acusan a la actual primera ministra de corrupción y ser un títere de su hermano mayor, el depuesto jefe del Ejecutivo Thaksin Shinawatra, quien según los opositores gobierna desde su exilio en Dubai, donde evita una condena de dos años de prisión por corrupción.
"Bangkok será paralizado. Preparados para pasar la noche en las calles. No nos iremos a casa hasta que todo termine", declaró en la noche del domingo el líder de las protestas, el ex viceprimer ministro, Suthep Thaugsuban.
Suthep, sobre quien pesan dos órdenes de arresto por destrucción de la propiedad pública y sedición, lidera una de la columnas con dirección a la Casa del Gobierno para ocuparla de forma pacífica.
El líder insurrecto rechazó la oferta de las urnas al no ser su "objetivo" ya que tras la celebración de las elecciones "el régimen de Thaksin todavía se mantendrá" y aseguró que seguirán luchando en las calles, según reportan varios medios locales.
Tailandia arrastra una grave crisis política desde 2006 con frecuentes manifestaciones y protestas callejeras que buscan paralizar al Gobierno de turno.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.