“Mis clientes no leen el BILD”
La inmigración en Alemania es el reflejo de la otra cara de la crisis que impera aun en Europa En 2012 nacieron 673.570 niños y murieron, en el mismo año, 869.582 personas
En plena discusión sobre la posibilidad de otorgar un nuevo paquete de ayuda a Grecia y que ha envenenado la campaña electoral alemana, el ministro de Asuntos Exteriores alemán, Guido Westerwelle puso fin el lunes pasado a una jornada agotadora con una cena en su restaurante preferido en Berlín.
El ministro, después de ser anfitrión de la conferencia anual de embajadores alemanes, decidió cenar, con un pequeño grupo de amigos, en el restaurante Cassambalis, quizás el mejor restaurante de comida griega de la capital y donde también suele acudir la canciller Angela Merkel.
“Estaba de buen humor y, como siempre, hablamos un poco sobre política, pero la discusión la acompañamos con un buen vaso de vino tinto y un poco de queso”, dijo Constantin Cassambalis, el propietario del local, un griego de 68 años que nunca ha padecido la fobia que nació en Alemania, cuando el periódico BILD publicó una serie de mini-reportajes sobre la situación en Grecia, una nación que fue bautizado por el rotativo como un “país de flojos”.
Cassambalis nunca se sintió afectado por la odiosa cobertura del BILD sobre su país y tampoco el negocio empeoró. “Mis clientes no leen el BILD y saben muy bien de donde provienen los problemas”, dijo al comentar el éxito que tiene su local. “Pero la crisis en Grecia ha favorecido a este país”, añadió, al comentar el más reciente informe que publicó la Oficina Federal de Estadísticas (Destatis), donde se señala que la población de Alemania ha aumentado gracias a la inmigración, sobre todo de los países de Europa del Sur y del Este.
“Mis compatriotas vienen a buscar trabajo en Alemania, porque la situación no es buena en mi país”, añadió Cassamablis, al reflejar un nuevo fenómeno que provocó en Alemania que el número de habitantes creciera, hasta alcanzar 80,5 millones de personas.
“La causa principal del crecimiento de la población ha sido el fuerte aumento de la inmigración”, señaló Destatis en un comunicado oficial. En 2012 llegaron a Alemania 370.000 personas, de las cuales 36.000 tenían pasaporte griego. El mayor número de inmigrantes provino de Polonia (184.000 personas) seguido de Rumania con 117.000.
“La gente sabe, como mis compatriotas, que en este país hay trabajo, por eso vienen y no les importa lo que dicen los políticos o la prensa de aquí”, dijo Cassambalis, quien llegó como turista a Berlín en 1972 y, a causa de la dictadura de los coroneles que imperaba en su país, decidió quedarse en la ciudad.
El nuevo fenómeno de la inmigración en Alemania es el reflejo de la otra cara de la crisis económica que impera aun en Europa y que en parte fue generada a causa de las rígidas exigencias que impuso Merkel a sus socios comunitarios. La llegada de ciudadanos extranjeros a Berlín y Hamburgo, por ejemplo, las dos ciudades que registraron la mayor llegada de inmigrantes, también puede influir, si la tendencia continúa, a paliar los efectos de una tendencia que tiene en estado de alerta a las autoridades
En Alemania la tasa de mortalidad es mayor que la de la natalidad, una tendencia que puede poner en peligro, en un futuro cercano el vigor de la economía germana, así como el sistema de bienestar. En 2012 nacieron 673.570 niños y murieron, en el mismo año, 869.582 personas una tendencia que ocasionara un daño enorme a la economía germana.
Según estudios oficiales, en el año 2025, se perderán 6,7 millones de puestos de trabajo y 12 millones en 2050.
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