La popularidad de Merkel, por las nubes en Alemania

Angela Merkel es más popular que nunca desde que comenzó su segunda legislatura como canciller en 2009. Ni los problemas del euro ni la reciente dimisión del presidente federal han impedido que Merkel mejore su puntuación y continúe como líder político más valorado de Alemania. La jefa del Gobierno mejora en dos puntos (alcanza ahora 64 puntos sobre 100) el resultado que obtuvo en diciembre en la encuesta mensual que publica el semanario Stern.

El sondeo también registra una ligero aumento de la intención de voto del partido socialdemócrata (SPD), que obtendría un 26%. La Unión Demócrata Cristiana se queda en el mismo resultado de las cuatro últimas semanas y, junto a los socialcristianos bávaros de la CSU, permanecería como principal partido parlamentario con un 38&. Los socios de Merkel en la coalición de Gobierno, los liberales del FDP, se quedarían de nuevo fuera del Bundestag con un 3%.

No obstante estos malos resultados, el FDP ha mejorado sus expectativas de voto. Su líder Philipp Rösler, que hace dos semanas dio un golpe de mano al imponerse a Merkel en las negociaciones para designar al futuro presidente de Alemania, también suma puntos de popularidad. Es una alegría discreta, porque no consigue abandonar el último puesto entre los principales políticos del país. Comparte el farolillo rojo de la estima política con su compañero de partido el ministro de Exteriores, Guido Westerwelle.

No cabe duda de que los números económicos contribuyen a la popularidad de Merkel. Hoy mismo se ha conocido la estadística de paro del mes, que es la mejor registrada en febrero desde hace 21 años. La tasa de desempleo se sitúa en el 7,4%.

Las encuestas del Instituto Forsa que publica Stern suelen ser menos favorables para los socialdemócratas que las de otros institutos alemanes. El SPD se ha quejado algunas veces de sus malos resultados que obtiene en los sondeos del instituto, cuyo director, Manfred Güllner es, curiosamente, un veterano militante del SPD.