India libera a un icono del activismo
El doctor Binayak Sen fue acusado y detenido por ayudar supuestamente a la guerrilla maoísta, que opera en amplias zonas del país
El Tribunal supremo de India ha puesto en libertad bajo fianza a Binayak Sen, reconocido doctor y activista por los derechos humanos, que había sido condenado a cadena perpetua por traición a la nación y sedición.
Sen, especialista en salud pública, trabajó por muchos años en las zonas tribales y más pobres de India antes de ser acusado y detenido por ayudar supuestamente a la guerrilla maoísta, que opera en amplias zonas del país. Llevaba casi tres años en prisión y en diciembre del año pasado el juzgado de primera instancia le dio cadena perpetua.
Amnistía Internacional lo consideraba un preso de consciencia y había un gran movimiento a favor de su liberación en India. Además, una carta firmada por 22 premios Nobel pedía desde 2008 su liberación después de que recibiera el premio Jonathan Mann por Salud Global y derechos humanos por sus labor por la salud de los más pobres.
"Esta liberación es muy importante para India porque ayuda a relajar la histeria en que ha vivido el país. En los últimos años se ha coartado la libertad personal, la libertad de expresión, la libertad de criticar al gobierno, encubriendo todo como lucha contra los maoístas", asegura Shoma Chaudhury, de la revista Tehelka, que ha dado la más extensa cobertura al caso en los últimos años. La sedición "es un concepto colonial que debe dejar de ser aplicado" porque es una acusación muy seria y coarta las libertades, además se usa sin bases, asegura Chaudhury. Con ella coinciden muchos activistas.
"La liberación de Sen es una victoria moral", ha dicho la Unión del Pueblo para la Libertad Divil de Chhattisgarh, (PUCL, por sus siglas en inglés) la ONG de la que Sen es vicepresidente nacional. "Somos un país democrático. Él podría ser un simpatizante de los maoístas, pero eso no lo hace culpable de sedición", dijo el tribunal en su decisión. Primeramente Sen fue arrestado por sus visitas a la cárcel ver a Narayan Sanyal, un viejo líder guerillero. Su esposa, Ilina Sen, asegura que se trataban de visitas con propósitos humanitarios "como cualquiera merecía atención médica".
Sen niega vínculos con los maoístas, aunque ha criticado que el gobierno local combate a los rebeldes de Chhattisgarh mediante un grupo paramilitar llamado Salwa Judum. Su labor para mejorar la salud de las tribus en India es muy reconocida y también sus críticas hacia la creciente disparidad entre pobres y ricos en la India.
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