Heridos 27 policías en disturbios de disidentes republicanos en Belfast

Un total de 27 policías sufrieron heridas en una noche de disturbios en dos barrios de Belfast. Sólo tres de los heridos tuvieron que ser hospitalizados. Uno de ellos sigue ingresado, aunque su vida no corre peligro. La policía aseguró que los dos disturbios habían sido organizados y no espontáneos y el Sinn Fein hizo responsable a los disidentes republicanos del IRA Continuidad.

Las tradicionales marchas protestantes de julio suelen provocar incidentes de intensidad variable según los años. En ocasiones son un reflejo de la tensión política de ese momento. Otras veces son sólo consecuencia del grado de borrachera de los participantes, algo que a veces está vinculado a aspectos tan triviales como el calor: una noche de un caluroso fin de semana en julio suele invitar al consumo de cerveza y eso lleva a veces al gamberrismo sectario.

En esta ocasión de relativa calma política y calor moderado, los incidentes del domingo por la noche se inscriben en el empeño de los disidentes republicanos por boicotear el proceso de paz. En los últimos meses ha aumentado la intensidad y el número de los incidentes llevados a cabo por los disidentes y es tradicional que se incremente coincidiendo con las marchas protestantes que conmemoran la victoria del príncipe Guillermo de Orange sobre el rey católico Jaime II en la batalla del Boyne en 1690.

En esta ocasión los incidentes comenzaron poco antes de la medianoche del domingo al lunes en dos zonas separadas de la periferia de Belfast. En la zona de North Queen Street, un manifestante disparó con una pistola de aire comprimido, hiriendo de forma leve a tres policías. Los otros incidentes se produjeron en la zona de Broadway, sudoeste de Belfast.

En ambos casos, la policía intentaba evitar enfrentamientos directos entre elementos radicales de ambas comunidades y su acción fue premiada con lanzamiento de proyectiles y de cócteles molotov. Al menos un coche quedó destruido por las llamas. La marcha orangista que se celebró transcurrió sin incidentes de gravedad.

Los disturbios del domingo por la noche fueron condenados por el ministro de Justicia del Gobierno autónomo, David Ford, el candidato de consenso del Partido de la Alianza que recibió la cartera cuando por fin fueron traspasados los poderes sobre Policía y Justicia. "Los responsables de esa noche de disturbios tienen que ser condenados y está claro que son una pequeña minoría de gente que quieren crear el caos y hacer lo que sea para aumentar la tensión y el miedo de la comunidad", declaró.

A juicio de Gerry Kelly, dirigente del Sinn Fein, los incidentes no fueron instigados por residentes locales, sino disidentes del IRA Continuidad que están explotando a "elementos antisociales".