La Policía norirlandesa informa de dos atentados fallidos anoche

Varios hombres armados acorralaron y dispararon anoche contra unos agentes de policía en una localidad de Irlanda del Norte. No fue el único sobresalto de la noche. En la capital, Belfast, un coche bomba cargado con 180 kilos de explosivos estalló de manera fallida ante la sede de un organismo policial.

La Policía ha informado hoy de que dos personas han sido detenidas en relación con el primero de los hechos, que tuvo lugar en Garrison, un pequeño pueblo al suroeste del país, cuando varios hombres tendieron una emboscada a unos agentes de policía y les dispararon. Los agentes respondieron con disparos para alejar a los agresores. No hubo ningún herido.

En el segundo ataque registrado anoche, esta vez en Belfast, un coche bomba explotó de manera fallida junto a la barrera de entrada a la sede de la Comisión Policial de Irlanda del Norte, un organismo público formado por políticos y miembros independientes que supervisa las labores policiales y garantiza su imparcialidad. Solo estalló una parte de los 180 kilos de explosivos con los que iba cargado el coche, lo que incendió el vehículo pero no dejó ningún herido.

Los episodios de violencia esporádica en Irlanda del Norte han aumentado desde el pasado mes de marzo, cuando disidentes republicanos mataron, en dos atentados diferentes sucedidos ese mes, a dos soldados británicos y a un agente de policía.

"Aparentemente los disidentes están ampliando la escala de sus ataques", ha señalado en un comunicado Alex Attwood, miembro del organismo atacado. Hace tres días, militares expertos en explosivos desactivaron una bomba que también iba dirigida contra objetivos policiales.