El comité de seguridad del Parlamento iraní rechaza enviar uranio al extranjero

Kazem Jalali, presidente del comité de Seguridad y Política Exterior del Parlamento, ha rechazado categoricamente la oferta presentada por la Agencia Internacional de la Energía Atómica (OIEA) para que Irán envíe su uranio al extranjero. "Esta demanda, por la que deberíamos enviar todo el material nuclear a otros países, para que a cambio satisfacieran las necesidades energéticas de Irán, está completamente fuera de toda cuestión", ha declarado Jalali a la agencia de noticias iraní ILNA.

Irán está actualmente negociando con el OIEA un principio de acuerdo para procesar en el extranjero uranio poco enriquecido, después de que Teherán pidiera el jueves a ese organismo modificaciones a ese plan. El Gobierno iraní ya ha manifestado que todavía no ha tomado una decisión definitiva sobre la propuesta de la OIEA pero contempla "positivamente" la evolución de las negociaciones y espera proseguir las conversaciones iniciadas en Viena y Ginebra.

Por su parte, la UE ha exigido a Irán a que "colabore plenamente" con la búsqueda de una solución negociada a la cuestión del programa nuclear de ese país ante la "persistente incapacidad" para cumplir sus obligaciones internacionales.

Los jefes de Estado y Gobierno comunitarios incluyeron un anexo sobre Irán en el texto de conclusiones de la cumbre, en el que se reconoce que la reciente revelación de la existencia de una planta para enriquecer uranio cerca de Qom "ha acrecentado notablemente" la "inquietud" de la Unión Europea.

Solución diplomática

Por ello, el Consejo Europeo insiste al régimen iraní que respete las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU y colabore "plenamente" con el Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA) a fin de "restablecer la confianza en la naturaleza exclusivamente pacífica" del programa nuclear de Teherán.

El Consejo Europeo se muestra "plenamente comprometido" a lograr una solución diplomática a la disputa, pero para ello insiste en que ese país tiene que colaborar "plenamente" con ese objetivo. Insiste en que las próximas medidas de la UE sobre Irán se decidirán en el marco del enfoque de la llamada "doble vía", que conjuga las sanciones de Naciones Unidas con la oferta de un diálogo que zanje la cuestión.

La UE recuerda además que un avance en la cuestión nuclear iraní "allanaría el camino" hacia una cooperación mutua fructífera en cuestiones políticas, económicas y de seguridad. El Consejo Europeo deplora además "la persistencia de las violaciones de los derechos humanos" en Irán, y recalca su honda preocupación por la aplicación de la pena de muerte, la violencia de la represión de los disidentes y los juicios multitudinarios celebrados tras las elecciones presidenciales contra defensores de los derechos humanos, activistas políticos y periodistas.

La Unión recalca también su "gran inquietud" por la situación de miembros del personal de misiones de países de la UE y de ciudadanos europeos sometidos a juicio en Irán y pide que "sean liberados pronta e incondicionalmente".