_
_
_
_

El regreso de De Gaulle

La sombra del general es alargada, muy alargada. Fundó la V República y dejó un camino tan trillado que incluso quienes parecen estar deshaciéndolo terminan completándolo y adaptándolo a los nuevos tiempos. Aquel militar alto y desgarbado, que consiguió situar a Francia entre los vencedores de la II Guerra Mundial, ha seguido reencarnándose en todos y cada uno de los presidentes que le han sucedido; incluso en el hiperactivo y pequeño seductor, de declaradas simpatías con EE UU, que es Nicolas Sarkozy. Lo más visible y espectacular del gesto de 1966 fue el desmantelamiento de las bases norteamericanas en Francia y el traslado del cuartel general de la OTAN desde París a Bruselas. Francia ganaba margen de maniobra y recuperaba soberanía, sin abandonar el bando occidental en la Guerra Fría, pero a costa de suscitar dolorosos sarcasmos por parte de EE UU. El secretario de Estado, Dean Rusk, respondió a la decisión con una pregunta que ha seguido resonando hasta 2003, con ocasión de cada crisis transatlántica: ¿también quieren que nos llevemos a nuestros soldados enterrados en los cementerios de Normandía?

De Gaulle no quería alejarse de su posición de aliado de EE UU, conquistada con enorme dificultad con un micrófono y mucho voluntarismo en Londres durante la Guerra Mundial. Para el viejo general abandonar la estructura militar de la OTAN y echar a las tropas y bases norteamericanas era la mera continuación de su difícil tarea londinense, cuando se inventó como jefe de la Francia Libre, un paso que se deducía necesariamente de su pretensión de mantener una silla entre los grandes en el puesto de mando del mundo occidental, y que tenía dos correlatos de poder todavía más efectivos, en su derecho de veto como miembro permanente en el Consejo de Seguridad de la ONU y en su force de frappe, el arma nuclear. El vértice de esta construcción era la presidencia francesa bajo la V República, figura soberana que hace de interlocutor de la presidencia norteamericana y posee la clave del maletín nuclear.

Muchos echarán en cara ahora al biznieto político de De Gaulle, a Sarkozy, por dilapidar la herencia y ceder de nuevo soberanía a la superpotencia tutelar. El teatro de sombras de la política necesita siempre de los tópicos y de los personajes estereotipados, por lo que el guión exige que el izquierdista antiamericano y el gaullista puro aparezcan gesticulando y vociferando contra la pérdida de la independencia y la traición al general. Pero la realidad demuestra que no hay para tanto. Los móviles de Sarkozy son perfectamente racionales: quiere ganar con este movimiento un mayor protagonismo en la construcción de la defensa europea y a la vez reforzar la posición negociadora de Francia en la escena internacional. Sobre todo de cara a la renovación del Tratado de No Proliferación nuclear, en 2010, donde aparecerá como potencia nuclear perfectamente leal a Washington pero decidida a jugar su papel en la negociación multilateral. Como hizo De Gaulle en numerosas ocasiones, su objetivo es convertir su debilidad en una fortaleza.

La venta de la decisión, iniciada prácticamente con su campaña electoral, está muy trabada. De creer a pie juntillas lo que dice el Libro Blanco sobre Defensa de 2008, encargado por Sarkozy, apenas tiene trascendencia. Francia se reintegrará en los dos únicos comités de los que estaba ausente hasta ahora: el de Planes de Defensa y el Grupo de Planes Nucleares. El primero es un órgano de debate fundamentalmente estratégico sin incidencia en las decisiones; y el segundo tiene funciones fundamentalmente de consulta e información, por lo que además la independencia del arma nuclear francesa no se verá afectada por la integración: la bomba (la bombinette, dicen los franceses humorísticamente) seguirá en manos exclusivas del presidente, tal como quiso De Gaulle y ningún presidente después ha querido corregir. No se someterá ni a la doble llave, que es el sistema británico de práctica supeditación a Washington, ni mucho menos, tal como se llegó a especular justo después de la caída del Muro de Berlín, se propondrá que disponga de ella algún día la UE. Uno de los mayores atractivos de esta decisión, sobre todo para los militares franceses, lo ofrecen los nuevos puestos que deberá ocupar Francia en el nuevo esquema, que pasará de un centenar y medio a cerca de 800 y que deberán ceder los otros aliados, especialmente Alemania y Reino Unido.

El Libro Blanco reivindica sin rebozo los objetivos perseguidos por De Gaulle en 1966 para justificar las decisiones actuales. La retirada de Francia "tenía por objetivo 'devolver a los ejércitos el carácter plenamente nacional' y evitar toda subordinación de nuestras fuerzas a una autoridad extranjera, así como toda presencia militar extranjera en nuestro territorio [rueda de prensa de De Gaulle en octubre de 1966]". Pues bien, "estos principios fundamentales permanecen, pero las transformaciones del entorno internacional, la evolución de la Alianza Atlántica y el compromiso de Francia en nuevas misiones de la Alianza, nos invitan a revisar la traducción cuarenta años más tarde". No es Francia, sino De Gaulle, quien regresa a la OTAN.

Comentarios

Si si, muy buen artículo pero como decía ayer nada es tan sencillo.Para Gaspard, tengo la sensación de un tiempo a esta parte que Alemania está reencontrando su posición del siglo XIX, como gran potencia del centro de Europa, rearticulandose como el eje alrededor del cual van a girar la Europa del Sur/Oeste y la Europa del este que vuelve también a las posiciones del XIX con el gran imperio ruso.Pero todo va a ocurrir en Oriente ya, y para mi un ejemplo importante es como hemos vivido una guerra secreta entre Francia y USA en africa dirimiendo el control de las materias primas del Africa subsahariana, guerra donde de pronto el nuevo gran imperio, China está pisando muy fuerte el accelerador.Pienso que esa entrada de Francia en la Otan tiene que leerse también en clave africana, esperemos quizas con un pacto de nobeligerancia entre las posiciones francesas y USA vista la fuerza de la inversión China en dicho continente, y su lenta pero imparable toma de fuerza.
Excelente articulo, oportuno, claro , breve y completo. No deja de ser curioso, intrigante y preocupante que Francia, el actual Gobierno Francés, desee integrarse por completo en este momento en la NATO, momento histórico de aparente distensión y de baja conflictividad militar en Europa, y de máxima división interna y elevada debilidad de esta organización militar defensiva. Por que ahora el actual Gobierno Francés decide dar dicho paso , a cambio de que , persiguiendo que objetivos o por temor a que amenazas o riesgos. Esperamos y deseamos que Francia entre por completo en la Estructura Militar de la NATO , en el comité de Planes de Defensa y en el Nuclear , con buenos planes que permitan el cumplimiento de sus misiones , y mejoren su operatividad y eficacia, y no por el contrario con la intención de contribuir a fortalecer las acciones destructivas, de descrédito, y debilitamiento a las que esta sometida esta organización y que provocan y realizan grupos de poder de algunos de los Estados que la integran.
Excelente,según nos quieren hacer creer los amantes del "militarismo". Le rappochement, Francia cruza la "ligne Maginot" y abandona su tan preciada Independencia. El precio politico cuando se sabrá.....? Por lo pronto, cede su mando militar! Otra victoria de los "Aliados" contra la Vieja Europa. Esperaremos al diplomatico Don Gaspard para que nos ilustre, imagino que lo enmarcará como una apuesta de futuro y un logro politico de la diplomacia Francesa,la soberanía, independencia y las libertades son utopías para los rancios de la izquierda. Un saludo.....Manuel
Cuando el río suena, porque piedras trae…Me parece muy oportuna la decisión de Sarkozy de volver al mando de la OTAN y preservar su arsenal nuclear. El asunto poco claro aquí son las “motivaciones reales” que impulsan e este presidente francés a derogar un pedazo de historia gaulleana. “El habla de amenazas nuevas”, cierto que son muchas, pero a que amenazas se refiere? En mi opinión, y de momento no es China, tampoco lo es Rusia, Irak, o Pakistán vs Afganistán y mucho menos contra la India, pero sí habría que ver con verdadera preocupación la imposición geopolítica en la geográfica territorial de Irán que viene descolgándose despacito una vez que terminen de poner juntos los legos de los cohetitos que volaran para hacer desaparecer la secular y moderna civilización Israelita, amén del trauma psicológico que el paquetito arroja contra naciones beligerantes que no permitan la expansión fascista-islámica iraní; pues el “ticket” para ganar el paraíso-terrenal como superpotencia es lo nuclear, claro está que esta observación es si se mira cómo y dónde el presidente pone su plata del crudo…. En breve, diría yo que existe un “excepcionalismo histórico” y religioso de una de las civilizaciones más antiguas de medio oriente con sus setentas millones y pico de persas al mando de líderes como Ayatollah Ali Khamenei y el presidente Mahmoud Ahmadinejad. No es casual que Irán conduzca guerras proxis para distraer la atención internacional. ¿No sería esto una de las razones que preocupan a Sarkozy y la OTAN? Sin deseos de especular, creo que el próximo evento mundial que hará realidad el imaginario colectivo apocalíptico, es Irán y ustedes y yo estaremos aquí para verlo.
“Descendents into Chaos” by Ahmed Rashid, perito en la materia y autor de numerosos libros sobre el tema.Excelente resumen político-histórico sobre: Irán, Alqeada, Taliban, y los intereses de Rusia, China, Pakistán, India, etc.
O sea, que Sarko quiere colocar a unos cuantos milikos franceses en la OTAN y, de paso, asegurarse unos cuantos contratitos de armas de destrucción moruna (a Nicolás le viene de familia lo de la caza del infiel, http://es.wikipedia.org/wiki/Nicolas_Sarkozy ). ¡Eso es un presidente con ideas claras para combatir la crisis, no como ZP y su "alianza de civilizaciones"!Ayer, Lluís, jugabas en el título del artículo con la peli de Woody Allen. Seguro que conoces una de sus más famosas citas, cuando Doris le dice a Harry: "You have no values. With you it's all nihilism, cynicism, sarcasm, and orgasm". Y él responde: "Hey, in France I could run for office with that slogan, and win!" Espero que, en vez de un gaullista resentido y acomplejado, el proximo presidente de La République sea Harry.
El Pais y el New York Times dicen:Obama prolonga las sanciones a Irán durante un año (Alice in Wonderland)Ya lo dije y lo vuelvo a repetir, este tipo de ingenuidades me revienta la sangre: “Los EE UU temen que el programa nuclear de Teherán sea una tapadera de armas atómicas, una acusación que Irán niega.”. Cuando se levante el primer hongo tampoco será suficiente. Qué imbecibilidad, por favor!!

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_