_
_
_
_
_

De general golpista a aliado de Washington contra el terror

Pervez Musharraf, nacido en India, abandona el poder tras nueve años como líder de Pakistán

Pervez Musharraf, desde hoy ex presidente de Pakistán tras anunciar su dimisión, ha pasado en casi nueve años de ser un general golpista, que acabó con el Gobierno de Nawaz Shariff, a ser aliado clave de EE UU en su lucha contra el terrorismo, por su cercanía a Afganistán y por su lucha contra el islamismo radical.

Ex general de 65 años, llegó al poder en octubre de 1999 en un golpe de Estado incruento contra el Gobierno de Sharif, ahora líder de la Liga Musulmana-N, que forma parte del Gobierno que ahora ha forzado su dimisión. Probablemente, su intento de mantenerse a toda costa al frente del país desde que el año pasado el Supremo dijo que un nuevo mandato de un militar era ilegal, ha sido lo que ha precipitado su caída.

Más información
Musharraf abandona la presidencia de Pakistán

Nacido en Delhi (India) el 11 de agosto de 1943, él y su familia tuvieron que huir al recién creado Estado de Pakistán poco después de la partición del imperio británico de la India en 1947. La familia se asentó brevemente en Karachi, entonces la capital de Pakistán, antes de partir hacia Turquía para una estancia de siete años gracias al puesto diplomático obtenido por el padre. Al cumplir 18 años y de nuevo en Pakistán, inició la carrera militar y no se quitó el uniforme hasta finales del año pasado, cuando se vio obligado a hacerlo como condición para poder seguir como presidente. Su madre dijo una vez que la razón de su ingreso en la academia militar fue que Pervez era mal estudiante y el padre decidió que sólo haría carrera en el Ejército. Fue condecorado por su valor durante la guerra de 1965 contra India y en 1966 ingresó en un grupo militar de élite.

Sin embargo, su verdadero ascenso a la cumbre comienza el 7 de octubre de 1998, cuando el primer ministro Shariff le nombra jefe de Estado Mayor, número uno del ejército. Sin embargo, al año siguiente, tras una incursión comandada por él en Kargil, en la región de Cachemira, disputada desde la creación de Pakistán, surge el enfrentamiento contra el hombre que le aupó a la jefatura del ejército: Shariff, presionado por Washington, ordena la retirada del ejército, haciendo a Musharraf responsable del fracaso. En su autobiografía, Musharraf aseguró que la operación fue un "hito en la historia del Ejército de Pakistán" y propició el proceso de diálogo que él mismo abrió con la India cinco años después.

El caso es que Shariff, "avergonzado", le repudió por aceptar una "retirada incondicional" ante el entonces presidente de EE UU, Bill Clinton, e intentó entonces destituirle, pero sus fieles en el ejército dan la vuelta a la situación y, durante un viaje del jefe del Gobierno, el 12 de octubre de 1999, Musharraf se hace con el poder gracias a un golpe de Estado incruento. En su autobiografía, cuenta Musharraf que "el golpe fue suyo [de Shariff]. La respuesta del Ejército fue el contragolpe".

Únete a EL PAÍS para seguir toda la actualidad y leer sin límites.
Suscríbete

El general promete restablecer la democracia y luchar contra la corrupción, aunque no es hasta el 20 de junio de 2001 cuando el general se proclama presidente, un puesto que ratifica y prorroga en un controvertido referéndum el 30 de abril de 2002. Sólo entonces permitió elecciones para formar un nuevo Parlamento, el mismo que el 6 de octubre de 2007 le otorgó un segundo mandato presidencial que no le ha durado ni un año.

El ex presidente paquistaní, Pervez Musharraf, junto a George W. Bush, en una imagen de 2006.
El ex presidente paquistaní, Pervez Musharraf, junto a George W. Bush, en una imagen de 2006.AFP

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_