_
_
_
_
_

Los profesores plantan cara a Sarkozy

Más de 20.000 personas protestan en París contra los planes del Gobierno de reducir puestos de trabajo en el sector educativo

Profesores y estudiantes franceses, durante la manifestación desarrollada en el centro de París
Profesores y estudiantes franceses, durante la manifestación desarrollada en el centro de ParísAP

Miles de profesores, arropados por muchos padres de alumnos y algunos estudiantes, desfilaron este domingo en París contra el plan del Gobierno conservador francés de suprimir puestos en la enseñanza y obligar a los docentes huelguistas a notificarlo con 48 horas de adelanto.

Más de 45.000 personas participaron en el desfile, según la FSU, el sindicato mayoritario en la enseñanza y que convocó la manifestación, mientras que la policía los calculó en 20.000.

Los participantes en la marcha desde la Plaza de la Opera hasta la de la Bastilla corearon: "si no nos escuchas bajaremos a la calle para gritar", "Resistencia", o "estamos hartos de estos payasos que cierran las fábricas y las escuelas".

"El Gobierno tiene que hacer un gesto para reanudar el diálogo", afirmó el líder de la FSU, Gérard Aschieri, mientras otra dirigente sindical advertía de que "si el Gobierno quiere romperlo todo, habrá una radicalización".

Firmeza del Ejecutivo

El ministro de Educación, Xavier Darcos, aseguró que está "a la escucha" del mundo docente, en declaraciones a una emisora, pero aseguró que "sea cual sea la dimensión de las manifestaciones" no modificará ni retirará sus proyectos de reformas.

Únete a EL PAÍS para seguir toda la actualidad y leer sin límites.
Suscríbete

La afluencia rebasó holgadamente el objetivo inicial de la FSU de congregar en París a unos 10.000 manifestantes de todo el país, sólo tres días después de la jornada nacional de huelga y manifestaciones de funcionarios para denunciar la supresión de puestos en la Administración pública, y en especial en la enseñaza.

De los 22.900 puestos de funcionarios que se suprimirán este año, 11.200 lo serán en la enseñanza, dentro del plan del presidente francés, Nicolas Sarkozy, de reemplazar a sólo uno de cada dos funcionarios que se jubilen en los cinco años de su mandato.

Las manifestaciones del pasado jueves congregaron a entre 300.000 y 200.000 personas en todo el país, incluidas entre 50.000 y 18.000 en París, según las respectivas cifras sindicales y policiles.

Fue al termino de esa jornada cuando Sarkozy anunció que antes del verano se presentará un proyecto de ley para imponer un servicio mínimo de acogida en las escuelas en caso de huelga y obligar a los docentes huelguistas a notificarlo con 48 horas de adelanto.

Es "una provocación", dijo una manifestante, al insistir en que los docentes ya avisan con varios días de antelación a los padres de alumnos cuando van a secundar una huelga. Los sindicatos acusan a Sarkozy de "traspasar la línea roja" al "limitar" el ejercicio del derecho de huelga, mientras que la oposición de izquierdas dice que el plan no es constitucional.

Los sindicatos de la enseñanza ya han convocado, junto a asociaciones de padres y de alumnos, una jornada unitaria de manifestaciones para el próximo sábado.

Mientras, para el jueves, los asalariados de todo el país están convocados a paros y manifestaciones en protesta contra la reforma de las pensiones impulsada por el Gobierno. Esa jornada no debería tener mucho impacto en la enseñanza, pero sí en el transporte público, ya que los principales sindicatos de los ferrocarriles, la aerolínea Air France y el transporte urbano de París ya ha llamado a un paro de 24 horas.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_