Padre ahorca a su hijo obligado por una turba de 3.000 campesinos en Perú
El adolescente de 17 años, junto a otro quinceañero, había matado a siete personas para robarles el ganado y otros objetos de valor
Un hombre ha ahorcado a su hijo en una remota región del sur de Perú obligado por una turba de campesinos que acusaba al joven adolescente de dirigir una banda de asesinos y ladrones de ganado, ha informado la prensa del país andino.
Miembros de 12 comunidades campesinas de la provincia de Huancané, próxima al lago Titicaca, juzgaron sumariamente y condenaron a muerte a Gary Parisuaña, de 17 años, por asesinar a golpes junto a otro menor, de 15 años, a los hermanos Benigno y Remigio Yucra y robarles dos toros el pasado miércoles.
Los presuntos asesinos fueron reconocidos y capturados el jueves pasado por un grupo de pobladores de la comunidad de Patascachi, en Huancané, cuando pretendían vender el ganado robado en un mercado de la zona, según el periódico El Comercio.
Tras ser torturados por una multitud de campesinos, los dos adolescentes reconocieron formar parte de una banda de cuatreros dirigida por Parisuaña y admitieron haber asesinado a siete personas para robar su ganado y otros objetos de valor.
Parisuaña fue ahorcado el domingo y el ejecutor fue su padre, forzado por los cerca de 3.000 pobladores de la región que se acercaron a la poblado de Patascachi, en Huancané, para participar
en el linchamiento. El otro joven capturado fue salvado de la muerte por algunos dirigentes comunales, que sin embargo no pudieron evitar que fuera azotado en público como castigo.
Versiones de los lugareños indican que Parisuaña había sido detenido con anterioridad y entregado a la Policía de la región. El fiscal, sin embargo, ordenó su liberación, lo que ocasionó descontento y amenazas de linchamiento popular. Pese a que desde primera hora de la mañana del jueves se sabía que el joven había sido retenido por la población de Patascachi, ni la Policía ni el gobernador del distrito se presentaron en la zona para evitar el linchamiento, de acuerdo a El Comercio.
En los últimos tres años, al menos tres personas, entre ellos un alcalde, fueron linchadas por campesinos en Puno, región situada en el altiplano andino junto a la frontera boliviana.
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