La policía británica busca pistas del asesino con un vídeo de una de las prostitutas muertas

La policía británica ha divulgado hoy imágenes de vídeo de una de las cinco prostitutas halladas muertas en Ipswich (este de Inglaterra) en las últimas dos semanas, Anneli Alderton, que estaba embarazada de tres meses cuando fue asesinada. El objetivo es conocer sus últimos movimientos para facilitar la captura del asesino en serie que está poniendo en jaque a las autoridades de Reino Unido.

El detective de la Policía del condado de Suffolk, Stewart Gull, ha hecho un llamamiento a los ciudadanos para que aporten información sobre los pasos de la joven, de 24 años, que el 3 de diciembre tomó un tren en el vecino condado de Essex. En las imágenes, captadas por una cámara de seguridad, se ve a Alderton en el vagón vacío de un tren que cubría la ruta entre Harwich y Colchester, vestida con cazadora negra, vaqueros y calzado blanco, y el pelo recogido. "Queremos saber en qué estación se bajó y a dónde fue después", ha insistido Gull.

Embarazada de tres meses

Horas antes, la subcomisaria Jacqui Cheer ha confirmado que la joven, cuyo cadáver fue descubierto el pasado domingo en una zona boscosa de Nacton, estaba embarazada de tres meses. Cheer ha aclarado que, aunque esto es una circunstancia "triste", no es "relevante para la investigación".

En su comparecencia ante la prensa, Gull ha dicho que actualmente se investiga a entre 50 y 100 personas, aunque ninguna de ellas ha sido interrogada aún en calidad de sospechosa. Aunque la policía no quiere usar el término "asesino en serie", el detective ha admitido que los asesinatos muestran las mismas pautas y "es posible que hayan sido cometidos por el mismo individuo", aunque puede haber "otros implicados". Desde el inicio de la investigación, no se ha confiscado ningún vehículo, aunque se ha entrevistado al conductor de un BMW que supuestamente invitó a subir a Alderton. Los investigadores también están interesados en interrogar a un hombre que el viernes acudió a la misa oficiada en memoria de las víctimas en compañía de una joven prostituta que también las conocía. Andrew Purdy, de 44 años, declaró a los medios locales que era amigo de las chicas, a quienes intentaba ayudar y con las que solía pararse a hablar cuando pasaba con el coche.

Un complicado puzzle

Pese a la falta de sospechosos y material incautado, la policía asegura que "se están haciendo progresos", y describe la pesquisa como un puzzle, del que "se han completado los márgenes pero aún queda rellenar el centro". Unos 350 agentes de 31 cuerpos policiales del Reino Unido participan en la investigación, una de las más grandes jamás llevadas a cabo en este país.

Se investigan de forma independiente pero coordinada las muertes de Gemma Adams, de 25 años, cuyo cadáver fue hallado el 2 de diciembre en un arroyo en Hintlesham; Tania Nicol, de 19, encontrada el día 8 en la misma corriente en Copdock; Anneli Alderton, de 24, quien fue localizada el 10 de diciembre en Nacton; y Paula Clennell, de 24 años, y Annette Nicholls, de 29, descubiertas el día 12 en un bosque de Levington.

Todas las mujeres halladas muertas estaban desnudas pero no mostraban signos de violencia o agresión sexual, y tres de ellas -Nicol, Adams y Nicholls- aún llevaban sus joyas. Los forenses han determinado que Clennell murió por "una opresión en el cuello" y Alderton fue estrangulada, pero siguen los análisis para averiguar cómo murieron Nicol, Adams y Nicholls.