El líder de Hezbolá pide a los árabes que salgan de Haifa para "bombardearla masivamente"

Hasan Nasralá, el clérigo chií líder de Hezbolá, ha respondido con una dura amenaza a la decisión del Gobierno israelí de dar luz verde a una nueva invasión del Líbano. "Vamos a convertir la tierra del sur del Líbano en una tumba para los invasores sionistas", ha advertido el clérigo en un discurso divulgado por la televisión Al Manar, órgano de propaganda de Hezbolá.

Mientras, siguen las discusiones en la ONU para lograr una redacción definitiva de la resolución que pueda ser aprobada esta semana. La esperada resolución no llegará hasta que no se pongan de acuerdo Estados Unidos y Francia, cuyas discrepancias ponen en riesgo la adopción del proyecto de resolución en el Consejo de Seguridad para pedir fin a las hostilidades.

Fuentes diplomáticas han señalado que las divisiones entre Francia y EE UU son muy profundas y que los recientes acontecimientos no contribuyen a acercar posturas, por lo que es posible que haya una demora considerable en la adopción de la resolución y especulaban incluso con que no llegue jamás a someterse a votación. El embajador de EEUU, John Bolton, tampoco se ha mostrado demasiado optimista a la salida de la reunión de los cinco miembros permanentes del Consejo, pero ha expresado su disposición a impulsar las discusiones y a cerrar lo antes posible el texto de la resolución.

Amenaza

Sentado en una butaca, con el rostro relajado y flanqueado por la bandera libanesa y la amarilla de Hizbulá, Nasralá se ha dirigido a todos los libaneses, que incluso se paraban frente a las pocas cafeterías que quedan abiertas en Beirut por la noche para escuchar sus palabras. En medio de la atención de todo un país, Nasralá ha recriminado a Israel el uso de una agenda política dirigida a crear conflictos fratricidas en el Líbano y ha advertido a los libaneses de que se cuiden de caer en la trampa del enfrentamiento intercomunitario.

Asimismo, ha pedido a los árabes que viven en la ciudad septentrional israelí de Haifa que la abandonen, ya que va a ser "bombardeada de forma masiva".

Nasralá también ha criticado el plan de alto el fuego presentado ante el Consejo de Seguridad de la ONU por Francia y Estados Unidos aunque ha respaldado, con reservas, el plan de siete puntos diseñado por el Gobierno libanés como contraoferta.

Lenta diplomacia en el Consejo de Seguridad

El presidente francés, Jacques Chirac, ha pedido hoy a EE UU que acepte cambios en el proyecto de resolución de alto el fuego que debate el Consejo de Seguridad de la ONU para poner fin a la guerra en Líbano. Chirac pide que se tengan en cuenta algunas de las reivindicaciones libanesas en la redacción de la resolución porque sería "inmoral" renunciar a conseguir un alto el fuego.

"No quiero ni imaginar que no haya una solución" porque "significaría que se acepta la situación actual y se renuncia al alto el fuego inmediato", lo que sería "la más inmoral de las soluciones", ha dicho el presidente francés en una rueda de prensa desde Tolón (sureste de Francia). Por ello, ha explicado que el proyecto de resolución, presentado el sábado al alimón por Francia y EE UU para poner fin a la crisis, era "una base de trabajo" a la que se debería "integrar un cierto número" de las peticiones del Gobierno libanés, representado en el Consejo de Seguridad por enviados de la Liga Árabe.

El proyecto franco-estadounidense incluye una petición de "alto el fuego inmediato", pero no pide la retirada del ejército israelí y sí el desarme de la guerrilla de Hezbolá. Líbano pretende que se incluya, al menos, la retirada de los soldados israelíes, que serían sustituidos por un contingente internacional. Además, ofrece el despliegue de 15.000 de sus soldados para hacerse con el control efectivo del sur del país. "Parece que hay reservas estadounidenses para adoptar este proyecto", ha dicho Chirac, que considera que la oferta libanesa es "muy importante" y podría facilitar la consecución de un acuerdo, ya que permitiría a Líbano "ejercer su soberanía sobre todo su territorio", algo que demanda el proyecto de resolución.

Mientras, siguen las discusiones en la ONU para lograr una redacción definitiva de la resolución que pueda ser aprobada esta semana. Anoche, en una reunión abierta del Consejo de Seguridad. Chirac espera que EE UU haga alguna concesión en la redacción del texto inicialmente presentado. De lo contrario, Francia "presentará su propia resolución".