Evacuadas más de 11.000 personas ante el peligro del volcán Merapi

Unas 11.000 personas se han visto obligadas a abandonar sus hogares, situados en municipios cercanos al volcán Merapi, el más activo de Indonesia y que hoy ha vuelto a registrar un alto grado de actividad por tercer día consecutivo, lo que eleva el riesgo a que entre en erupción. El Merapi, que está en alerta máxima desde el pasado 13 de mayo, ha entrado en erupción en unas 70 ocasiones desde mediados del siglo XVI -la más reciente en 1994- cuando causó la muerte de 60 personas.

Los habitantes de los pueblos y aldeas colindantes a la base del volcán ha sido trasladados a refugios temporales, después de que desde lo alto del cráter no dejara de emanar lava y nubes de gases hacia las laderas del monte. La actividad de este volcán no ha dejado de aumentar en los últimos días y sobre todo después del destructivo terremoto que asoló a finales del mes pasado la región de Yogyakarta, en el centro de la isla de Java, con más de 6.000 muertos.

El Observatorio Vulcanológico del Merapi (OVM) ha registrado cerca de un centenar de nubes formadas por cenizas, polvo y piedras incandescentes. Estas nubes tóxicas, que pueden alcanzar velocidades de hasta 100 kilómetros por hora, ya habían avanzado el lunes a varios miles de metros desde el cráter hacia la vertiente sur.

Según Subiandro, director del OVM, el cono volcánico del Merapi ha acumulado hasta ahora más de tres millones de metros cúbicos de lava y podría ceder en cualquier momento. "Tenemos varios escenarios previstos, en el peor de ellos, una gran erupción arrasaría hasta 12 kilómetros", ha alertado el funcionario. Según ha explicado, el terremoto tectónico de la semana pasada en Java Central activó aún más el volcán y tuvo dos efectos claros sobre el mismo: perjudicar la estabilidad del cono volcánico y aumentar la acumulación de gases en su interior.