El Gobierno anuncia que España convertirá la deuda de Bolivia en planes de Educación

El presidente electo de Bolivia, Evo Morales, se ha reunido esta tarde con el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y le ha agradecido su "sensibilidad" con los problemas a los que se enfrenta el país latinoamericano, tras conocer que España condonará "una parte sustancial" de los 100 millones de euros de deuda externa que tiene contraída con España, a cambio de planes de Educación.

En la rueda de prensa posterior a la reunión con Zapatero, Morales ha repetido la principal propuesta que le llevó al poder en las recientes elecciones legislativas: recuperación del control de los recursos naturales, para incrementar los ingresos y reinvertirlos en el sector agrario, que da trabajo a la gran mayoría de la población indígena.

El Gobierno ha saludado las propuestas de Morales, y ha anunciado en ese sentido que España va a lanzar un profundo plan de cooperación en materia agrícola con el país sudamericano, que se centrará fundamentalmente en la mecanización y en la instalación de regadíos.

Respecto a la posición de las empresas energéticas tras su llegada al poder, Morales ha asegurado que el Estado boliviano "va a ejercer su derecho de propiedad sobre sus recursos naturales", es decir, que los va a nacionalizar, para matizar después que esto no significa que se vaya a "confiscar, ni a expropiar", ni que se vaya a expulsar a empresas extranjeras.

"Bolivia necesita socios, no patrones", ha repetido Morales, que ha asegurado que la seguridad jurídica para los inversores extranjeros está garantizada. El secretario de Estado de Comunicación, Fernando Moraleda, ha refrendado esta declaración, asegurando que los intereses de las empresas españolas son "plenamente compatibles" con las necesidades de desarrollo de ese país.

Un día lleno de citas oficiales

Por la mañana, Morales se ha reunido con el ministro de Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, que le ha expresado el deseo del Gobierno español de ampliar la presencia empresarial y las inversiones de nuestro país en Bolivia una vez de comienzo su mandato, el próximo 22 de enero. Moratinos ha mostrado además el apoyo de España al "fortalecimiento de la estabilidad política, económica y social" de Bolivia, y ha reiterado "voluntad y disposición" de nuestro país a "intensificar las relaciones bilaterales en ámbitos de interés mutuo".

El ministro español ha recordado que España es uno de los principales inversores extranjeros de Bolivia, especialmente en los sectores energético, financiero, de las comunicaciones y químico, y en ese sentido se ha referido al proceso anunciado por Morales de nacionalización del sector energético, subrayando la importancia de "fortalecer la seguridad jurídica y la idea de negociación como fórmula ideal para resolver eventuales controversias".

Tras reunirse con Moratinos, su siguiente cita ha sido con el ministro de Industria y Turismo, José Montilla, que ha admitido que en Bolivia habrá "un cierto cambio en las reglas del juego", aunque ha asegurado que el presidente electo, Evo Morales, es "consciente" de que las empresas extranjeras necesitan "un marco estable y confianza".

A la izquierda de Repsol

La hora de la comida ha servido para que Morales se reuniese con la patronal de empresarios, y el líder cocalero ha aprovechado para calmar los ánimos. De hecho, Morales ha tenido sentado a su derecha al presidente de la petrolera hispano-argentina Repsol YPF, Antonio Brufau. Repsol YPF es la empresa española con mayor presencia en Bolivia, el segundo país de Suramérica por reservas de gas natural después de Venezuela.

El presidente electo boliviano ha incidido así en que los recursos naturales de su país pertenecen "al pueblo boliviano y es el Estado quien tiene que administrarlos", para reconocer acto seguido la "experiencia" de las empresas españolas para actuar como socios en la adecuada gestión de estos recursos.