El Gobierno estima que supone "un paso en la buena dirección"

José Luis Rodríguez Zapatero, presidente del Gobierno

Eduardo Zaplana, portavoz del PP

En nombre del PP, su portavoz ha advertido de que habrá que esperar a saber cuál es el "saldo neto" para España. "Cualquier mejora siempre tiene una valoración positiva, pero de momento no ha cambiado nada sustancialmente, porque lo importante no son los fondos de cohesión. Habrá que conocer cuál es el saldo neto para España, cuál es el recorte que pierde España y si vamos a ser o no contribuyentes o receptores, y no engañarse", ha dicho. Además, ha deslizado críticas al Gobierno, diciendo que en el debate sobre las perspectivas financieras España "no tenga el respeto ni la consideración que merece" por culpa de un Ejecutivo que "no ha llevado bien" la negociación, que "no ha hecho los deberes" y "busca culpables" de su fracaso y se "pone la venda antes de la herida". "Vamos a ver si conseguimos un buen acuerdo, aunque me parece imposible", ha dicho Zaplana.

José Manuel Durao Barroso, presidente de la Comisión Europea

Durão Barroso ha señalado que la nueva propuesta de la presidencia británica "es simplemente insuficiente", que está "lejos" de responder a sus exigencias y que aún hay muchos asuntos por resolver. En su opinión, "hay que andar un largo camino" y queda "muy poco tiempo". "Estoy decepcionado por esta propuesta y estoy preocupado sobre la posibilidad de un acuerdo, pero al mismo tiempo estoy determinado a que haya un acuerdo", porque un fracaso en esta cuestión "enviaría un mensaje muy negativo a nuestros ciudadanos", ha subrayado.

Francia

El ministro francés de Asuntos Exteriores, Philippe Douste-Blazy, ha asegurado que la propuesta británica "desgraciadamente no es una base para un acuerdo aceptable para todos". "El Reino Unido sigue sin estar preparado para asumir su justa parte de la carga financiera", ha asegurado el jefe de la diplomacia gala en el Senado. En todo caso, el ministro ha expresado su esperanza de que Londres "no haya dicho su última palabra" en cuanto a la negociación.

Polonia

El primer ministro polaco, Kazimierz Marcinkiewicz, ha rechazado la nueva propuesta, que ofrece a su país unos 1.200 millones de euros más que la que Reino Unido puso sobre la mesa el 5 de diciembre, y ha amenazado con vetarla si no se producen cambios. "La propuesta, si sigue como está, será vetada por Polonia", ha señalado Marcinkiewicz en una breve rueda de prensa. "No nos satisface de ninguna manera", ha remachado.

Italia

Italia considera también que la nueva oferta británica "sigue siendo insatisfactoria" y opina que se trata de "una respuesta selectiva y parcial a las peticiones de algunos países miembros". Sin embargo, el texto, "sigue dejando sin resolver el problema de una reforma estructural y permanente del cheque británico", al tiempo que "penaliza a Italia" respecto a otros países miembros anteriores a la ampliación en los fondos para el desarrollo rural. En un comunicado, el ministerio de Exteriores italiano reitera la voluntad de su Gobierno de trabajar para lograr un acuerdo en la cumbre de mañana.

Alemania

Alemania "puede vivir" con la última propuesta de financiación de la UE, según fuentes gubernamentales. Con la corrección del mecanismo del IVA, Alemania ahorrará 7.000 millones de euros. Para Alemania, esa corrección es tan importante como la review clause para los británicos, que prevé una revisión de la estructura financiera de la UE y donde, según los negociadores alemanes podría buscarse una fórmula que permita a Tony Blair aceptar un compromiso.

Bélgica

Bélgica ha vuelto a rechazar la propuesta de la Presidencia británica y ha pedido a Londres que "haga de nuevo sus deberes". "La propuesta se parece más a una caja de sorpresas en la que algunos Estados miembros pueden buscarse un regalo, que a un acuerdo global y equilibrado", ha dicho Didier Seeuws, portavoz del primer ministro belga, el liberal Guy Verhofstadt.