Sharon da luz verde al Ejército para responder con contundencia a los ataques de Hamás
Cinco activistas del grupo islámico escapan con vida de un ataque selectivo israelí
Ante la previsión de que las milicias palestinas continúen con sus ataques contra colonias y asentamientos judios, el primer ministro israelí, Ariel Sharón, ha advertido hoy de que el Ejército cuenta con "luz verde para operar contra los terroristas palestinos y hacerlo sin restricciones". Entretanto, cerca de 4.000 soldados israelíes se hallan concentrados al norte y al sur de Gaza a la espera de recibir instrucciones para llevar a cabo una posible operación de gran envergadura.
El responsable de Defensa, Shaul Mofaz, ha manifestado durante la reunión semanal del Gabinete israelí que, si en los próximos días el presidente palestino, Mahmud Abás, no logra frenar los ataques de Hamás y Yihad Islámica contra objetivos israelíes, entonces Israel se verá obligada a actuar.
Pero lo cierto es que Israel no ha frenado sus ataques selectivos. Esta tarde, un avión no pilotado de la Fuerza Aérea israelí ha lanzado un proyectil contra un vehículo que circulaba por el norte de la franja de Gaza y en el que viajaban cinco militantes de Hamás, que han logrado sobrevivir al impacto del misil, han informado fuentes de la seguridad palestina. En el vehículo, han agregado las fuentes, viajaban cinco miembros del brazo armado de Hamás, los "Batallones de Azedín Al-Kasam", que se encontraban en una zona próxima a la localidad palestina de Beit Lahía. Los tripulantes del vehículo lograron escapar al ataque, aunque el conductor resultó herido de consideración, según fuentes médicas palestinas. Según las mismas fuentes, los cinco militantes se disponían a lanzar cohetes Al-Kasam, de fabricación casera, contra objetivos israelíes momentos antes del ataque.
Ataques recíprocos
La jornada de violencia ha comenzado con la muerte, a primeras horas de la mañana, de Said Seyam, un dirigente del brazo armado de Hamás, que ha sido alcanzado por el disparo de un tirador de elite del Ejército israelí cuando se encontraba en tejado de su vivienda de Jan Yunes, al sur de la ciudad de Gaza. Israel responsabiliza a Seyam de estar implicado en numerosos ataques en los que perdieron la vida israelíes. Tras este suceso, un militante palestino ha sido abatido por fuerzas israelíes y otro ha resultado herido cuando ambos trataban de penetrar en la colonia judía de Netzarim, también en Gaza. Acto seguido, milicianos palestinos han lanzado varios proyectiles
de mortero contra los asentamientos judíos de Nevé Dekalim, Ganei Tal y Netzer Hazani, del bloque de Gush Katif, al sur de la franja. En la colonia de Nevé Dekalim cuatro israelíes han resultado heridos, dos de ellos con heridas graves, así como dos menores con lesiones leves, han indicado fuentes militares. Otros cinco palestinos -entre ellos una mujer y un menor- han resultado heridos más tarde en la localidad de Jan Yunes, vecina a los asentamientos atacados, como consecuencia del bombardeo de tanques israelíes.
