La policía iraquí halla 35 cadáveres tiroteados cerca de la frontera de Siria

La policía iraquí ha descubierto en los dos últimos días los cadáveres de al menos 35 personas tiroteadas en la ciudad iraquí de Qaim, en el oeste, cerca de la frontera con Siria, según han informado fuentes médicas y policiales. Según el director del hospital de la ciudad, todos los fallecidos, entre los que se cuenta una mujer, vestían ropas de civil; 15 de ellos fueron decapitados, según el diario estadounidense The New York Times. Sus colegas del Washington Post elevan la cifra a 39 muertos.

Aunque no se tiene seguridad, el portavoz policial ha declarado que podría tratarse de soldados iraquíes y que podrían llevar muertos hasta una semana. La insurgencia iraquí se ha marcado como objetivo las emergentes fuerzas del orden del país -ejército y policía- y varias veces los rebeldes han emboscado transportes de tropas o agentes y han acabado con la vida de sus integrantes.

Atentado en Bagdad

Al menos tres personas han muerto y más de 30 han resultado heridas en un atentado perpetrado hoy a primera hora por un conductor suicida en el centro de Bagdad, según han informado fuentes policiales. El terrorista, al volante de un camión de recogida de basura cargado de explosivos, ha hecho estallar la carga al aproximarse a un control policial instalado frente a un hotel donde suelen alojarse contratistas extranjeros y que se encuentra cerca de la sede del Ministerio de Agricultura, en el este de la capital. El atentado ha sido reivindicado por la rama de Al Qaeda en Irak, dirigida por el jordano Abu Musab Al Zarqaui, que afirma haber atacado un "feudo judío".

El oficial de policía Mazin Hamid dijo que el atacante ha introducido el camión en un parking entre el hotel Sadeer, que ha sido reiteradamente atacado por hombres armados en el pasado, y el Ministerio de Agricultura. Antes y después de la explosión se han escuchado varios disparos.

Según la Policía, un grupo de insurgentes vestidos de policías han abatido en primer lugar al guardia de la puerta del Ministerio, permitiendo la entrada del camión de basura en el recinto que comparten el Ministerio y el hotel. Según agentes de seguridad extranjeros, otros guardias de seguridad en la zona han disparado contra el vehículo, intentando evitar que explotara.