Otros nueve jóvenes japoneses se suicidan tras un pacto por Internet

La policía japonesa ha encontrado hoy los cuerpos sin vida de nueve personas en lo que parecen ser dos suicidios colectivos sincronizados en distitos puntos del país. En ambos casos, la muerte se produjo al inhalar monóxido de carbono desprendido por carbón artificial dentro de sendos automóviles cerrados. Al parecer, se habían conocido por Internet.

En el primer caso, en un coche aparcado en Miura (al sur de Tokio) se había encarrado tres parejas, todos jóvenes, cuyos cuerpos se trata ahora de identificar. En el segundo, un hombre y dos mujeres, de unos 30 años, se quitaron la vida en otro vehículo aparcado en Higashi Izu.

Desde enero de 2003 unos sesenta japoneses han acabado con su vida asfixiados en vehículos cerrados o apartamentos, en una modalidad de suicidio que se conoce como "muerte pactada" por ser convenida de antemano, generalmente a través de Internet.

A través de páginas web jóvenes que atraviesan crisis encuentran personas en circunstancias similares para suicidarse juntos, usando casi siempre un brasero portátil que desprende monóxido de carbono en el interior de automóviles o apartamentos con las ventanas selladas.

En 2003 hubo 34.427 suicidios en Japón, es decir, un 7,1% más que en 2002, la cifra más alta desde que en 1978 se inició esta estadística.