El PP rechaza en solitario que Aznar explique en el Congreso la postura española sobre Irak

El PP se ha quedado solo rechazando hoy en la Diputación Permanente del Congreso la pretensión de PSOE, IU y Grupo Mixto, apoyada por todos los nacionalistas, de convocar un pleno extraordinario para que el presidente del Gobierno, José María Aznar, explique ante el Parlamento la posición de las autoridades españolas en relación con nuevo conflicto bélico en Irak.

Por contra, el PP entiende que todavía no es momento para ello y se ha refugiado en las explicaciones que dará esta semana la ministra de Exteriores, Ana Palacio.

El nuevo secretario de Política Internacional del PSOE, Manuel Marín, ha explicado que todos los jefes de Gobierno de la UE de países no neutrales han explicado su posición sobre la situación de Irak ante sus Parlamentos, y ha recordado que Felipe González informó cuatro veces al Congreso durante la llamada guerra del Golfo.

A su juicio, el Gobierno ha de aclarar si está o no de acuerdo con el concepto de 'guerra preventiva' auspiciada por Estados Unidos y con la 'guerra unilateral' que defiende George Bush, dos aspectos en los que el PSOE no está de acuerdo. Marín sospecha que el Gobierno está de acuerdo con la guerra preventiva y que además se ha comprometido a participar en el conflicto bélico, y que ahora no quiere acudir al Parlamento porque sabe que "hay un problema de opinión pública".

Desde Izquierda Unida, su portavoz parlamentario, Felipe Alcaraz, ha indicado que en este tema "Aznar se apunta a la posición más reaccionaria" de "cómplice" de Estados Unidos, hasta el punto de que "en ningún otro país de Europa se da tal cúmulo de servilismo" como el que a su juicio muestra el Gobierno español ante la Administración Bush.

La huída de Aznar

Tras recalcar que la ONU habla de la posibilidad de que un nuevo conflicto bélico en Irak provoque 500.000 víctimas, Alcaraz afirmó que Aznar se mantiene "huido del Parlamento" porque "posiblemente ya tiene comprometida la participación española y no quiere mentir ante la Cámara". "Intentan situar al Parlamento fuera de juego -se ha lamentado-. Van a coger un atajo para meternos en el terreno de la alegalidad".

Igualmente, el presidente de Iniciativa per Catalunya (IC-V), Joan Saura defendió en nombre del Grupo Mixto su respaldo a la comparecencia extraordinaria de Aznar basándose precisamente en el compromiso del presidente de hacer del Parlamento el centro de la vida política. "¿Qué más ha de pasar?", se ha preguntado.

Los nacionalistas catalanes y canarios, habitualmente aliados parlamentarios del Gobierno, han coincidido con el resto de la oposición en la necesidad de que el presidente del Gobierno ofrezca explicaciones sobre la situación de Irak y la posición española.

Jordi Jané, portavoz adjunto de CiU, se ha lamentado de que España ya se esté "posicionando" sobre este tema en el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas sin haber siquiera informado al Parlamento. "Es necesario que desde el Gobierno se genere un clima de consenso en España y que se agoten todas las vías posibles para evitar la guerra", emplazó.

"El PP no siempre está de acuerdo con el Papa"

Frente a las demandas de toda la oposición, el portavoz de Exteriores del PP, Gustavo de Arístegui, ha querido dejar claro que su partido está tan en contra de la guerra como el resto de grupos parlamentarios, pero ha precisado que quien tiene en sus manos evitarla es Saddam Hussein, a quien ha definido como un "dictador armado y peligroso" y "un riesgo cierto para toda la zona.

Arístegui, quien ha recalcado que el PP no tiene por qué "estar siempre de acuerdo con lo que diga el Papa", negó las acusaciones de "servilismo" hacia Estados Unidos y ha rechazado las sospechas de que el Gobierno ya ha comprometido su participación en un conflicto.

En este sentido, ha indicado que la exigencia de explicaciones al presidente es "prematura" porque todavía se está en fase de "presión" a Irak. "Seguimos en la fase de presión política y ya habrá más debates", ha comentado.