EE UU advierte a Israel que el cerco a Arafat no contribuye a terminar con el terrorismo
Israel aumenta la presión sobre Arafat para que abandone Palestina.-El líder palestino dice que "jamás" entregará a los supuestos terroristas atrincherados
Estados Unidos, principal aliado de Israel, ha hecho un llamamiento al Ejecutivo de Ariel Sharon para que su Ejército cese en el asedio al cuartel general del presidente de la Autoridad Palestina, Yasir Arafat en Ramala. El cerco "no ayuda a reducir el terrorismo o a promover las reformas palestinas", ha afirmado hoy el portavoz de la Casa Blanca, Jeanie Mamo.
"Nosotros presionamos a Israel para que continúe tomando en consideración las consecuencias que tienen sus acciones en el proceso para alcanzar el objetivo establecido por el presidente estadounidense George W. Bush en su discurso del 24 de junio", ha indicado en declaraciones a la prensa.
Entretanto, en Ramala, Arafat ha proclamado desde su derruido refugio presidencial que está dispuesto a resistir hasta ser un "mártir" y que "jamás" entregará a los 20 supuestos terroristas atrincherados en la Mokata y que Israel reclama. Así ha respondido el presidente palestino a las presiones de Israel, que ha cortado el agua, la luz y el teléfono del cuartel general, casi derruido, y le invita a optar por el exilio y no regresar jamás a Palestina.
No obstante, sobre el terreno la tensión ha disminuido un poco tras la orden del Ejército a cesar en la demolición del edificio donde se encuentra confinado el presidente palestino. La decisión de finalizar el trabajo de destrucción de las excavadoras militares ha llegado poco después de una reunión celebrada en Jerusalén entre oficiales militares israelíes.
Fuentes militares israelíes han afirmado que en la decisión han pesado las manifestaciones espontáneas de miles de palestinos registradas en Cisjordania y en la Franja de Gaza, en las que cinco civiles han muerto y decenas han resultado heridos por disparos del Ejército.
Asimismo -han dicho- también han influido en la retirada de las fuerzas de la Múkata las fuertes presiones que Estados Unidos ejerce sobre Israel para que actúe con calma en esta situación.
Cuatro palestinos muertos
Esta noche, cuatro palestinos han muerto y al menos una treintena han resultado en las violentas manifestaciones callejeras que se ha desatado esta madrugada en los territorios ocupados. Miles de palestinos han desafiado en Ramala, Nablús y Tulkarem el toque de queda impuesto por Israel hace tres meses y han tomado las calles, muchos de ellos armados, para protestar por el acoso del Ejército israelí a Arafat.
El Gobierno de Sharon ha autorizado al líder palestino esta mañana a abandonar el país, con la condición de que no vuelva. No parece que el rais vaya a aceptar la oferta, después de que esta madrugada haya declarado: "Quisiera probar el sabor al martirio y convertirne en un mártir". Sin embargo, su situación es cada vez más difícil desde que esta mañana el Ejército dejara a la Mokata sin agua, luz y teléfono.
En la franja de Gaza, miles de personas acompañadas por miembros armados de las fuerzas de seguridad palestinas se han dirigido hacia los asentamientos judíos y en varios puntos se produjeron enfrentamientos con los soldados. Las revueltas de protesta y solidaridad con Arafat se han extendido también entre los presos palestinos, que según fuentes palestinas se han amotinado en varias cárceles israelíes.
Arafat: "Quisiera probar el sabor del martirio"
El presidente palestino, Yasir Arafat, y los confinados en su cuartel general en la ciudad cisjordana de Ramala nunca se entregarán al Ejército israelí, según ha asegurado domingo un funcionario judío de origen árabe. Ahmed Tibi, un miembro árabe del Knesset (Parlamento) israelí, ha desvelado que telefoneó a Arafat pasada la medianoche del sábado y que el presidente palestino se encontraba en buen estado de ánimo. "Quisiera probar el sabor al martirio y convertirne en un mártir. Nunca nos pondremos de rodillas, nunca lo haremos", indicó Arafat a Tibi, según éste último.
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