Hugo Chávez regresa al poder en Venezuela

Venezuela ha vivido la caída y el regreso del chavismo al poder en 48 horas de infarto que han dejado más de 21 muertos. Diosdado Cabello, vicepresidente de Hugo Chávez, derrocado el viernes por un pronuncimiento cívico-militar, asumió esta madrugada de forma provisional la Jefatura de la República, mientras los militares detenían en Fuerte Tiuna al presidente interino, Pedro Carmona, que presentó la dimisión tras una jornada en la que han muerto nueve personas. A primera hora de esta mañana, Chávez ha regresado a Caracas, donde la Asamblea Nacional le ha devuelto la presidencia. El mandatario niega que vaya a haber una caza de brujas y ha descartado la convocatoria de elecciones, según ha señalado en declaraciones a la Cadena Ser.

Una vez "restablecido el orden" tras la renuncia de Carmona, Chávez ha salido de la isla de La Orchila rumbo a Caracas, donde ha llegado a las 2.50 horas (8.50 en España). El helicóptero del controvertido Chávez, de 47 años, ha aterrizado directamente en el Palacio de Miraflores, donde le esperaban miles de simpatizantes, después de dos días de destitución por un movimiento rebelde cívico-militar.

Entre cantos y loas de alabanza como "Chávez te queremos", el derrocado presidente ha bajado del aparato vestido de civil, con una chaqueta azul y sin su clásica boina roja, rodeado por numerosos efectivos de la Guardia de Honor presidencial, que le han apoyado durante su encierro.

El abrazo de Chávez y Cabello

Inmediatamente después, el círculo se ha cerrado y Chávez ha recibido de nuevo el poder de manos del presidente Asamblea Nacional, William Lara, tras el breve paso por la presidencia de su fiel número dos, Diosdado Cabello, quien se ha convertido por unas horas esta madrugada en el tercer presidente del país en 48 horas en cumplimiento de la Constitución, que le otorgó el poder al no haber firmado Chávez su renuncia.

"A Dios lo que es de Dios, al César lo que es del César y al Pueblo lo que es del Pueblo", han sido las primeras palabras del hombre que ha dirigido Venezuela tres años y dos meses tras fundirse en un abrazo Cabello. Después, ha hablado en directo al país en un largo discurso en el que ha pedido calma.

Las calles de la ciudad son una fiesta durante esta madrugada, cunado el pueblo conoció la noticia del fin del Gobierno provicional. Un millón de personas, con disparos al aire, están celebrando el retorno del anterior Gobierno.

Previamente, todas las cadenas de televisión -que han vuelto a transmitir en cadena, como la noche del jueves al viernes- habían mostrado un comunicado de Chávez, escrito de su puño y letra, en el que asegura que él nunca ha renunciado a la presidencia y que nunca ha perdido el apoyo del pueblo venezolano.

Tres presidentes en dos días

Los acontecimientos se han sucedido a gran velocidad en Venezuela. Hace 48 horas, el Inspector General de la Fuerza Armada Nacional y comandante en jefe, general Lucas Rincón, leyó un comunicado en el que informó que el alto mando militar había pedido a Chávez la renuncia y éste la había aceptado.

Chávez permaneció desde entonces en Fuerte Tiuna, el mayor acuartelamiento de Caracas, luego en otros centros militares y posteriormente fue llevado por las autoridades transitorias a La Orchila, en el Caribe, a 100 kilómetros al norte de Caracas, desde donde hoy ha regresado triunfal.

Mientras tanto, se formó un gobierno provisional con cuatro militares y seis civiles, dirigido por el empresario y líder de la Patronal Pedro Carmona, de 63 años, quien ha detentado la máxima instancia nacional apenas 28 horas.

Después de un día plagado de disturbios en Caracas que se saldaron con nueve muertos y más de 50 heridos, el Ejército, que comenzó a cuestionarse el proceso de transición, obligó al ya ex presidente Pedro Carmona a restituir en sus puestos a los miembros de la Asamblea Nacional (donde se concentra el Poder Legislativo) y a modificar los decretos aprobados tras la caída de Chávez, al tiempo que condicionaban su apoyo al nuevo régimen al cumplimiento de 12 condiciones.

El voto de la Asamblea Nacional

En un intento de evitar su destitución, Carmona accedió a las peticiones de los militares y los miembros de la Asamblea Nacional a los que destituyó la noche del viernes retornaban a sus cargos.

Al quedar restituida la Asamblea, mayoritariamente chavista, sus miembros tardaron sólo unas horas en nombrar a Cabello como Jefe de Gobierno hasta que se hiciera efectivo el regreso de Chávez. La primera y única medida tomada por el presidente más efímero de Venezuela ha sido la de reponer al general Lucas Rincón como jefe de las Fuerzas Arnadas.

A esas horas, José Vicente Rangel, el ministro venezolano de Defensa del Gobierno del presidente Hugo Chávez, reconocía que "el golpe se respondió con el contragolpe".

Así, el revanchismo de un fugaz Gobierno provisional, que desató una caza de brujas e intentó desmontar el orden institucional tejido por los chavistas a golpe de decreto y en 24 horas, ha devuelto al poder a Hugo Chávez y a su "revolución bolivariana".