El presidente de Ecuador afirma que no hay indicios de sabotaje en el avión siniestrado
Las labores de rescate han sido suspendidas temporalmente debido a la falta de visibilidad y la peligrosidad del terreno
El presidente ecuatoriano, Gustavo Noboa, ha dicho que en el accidente del avión comercial de TAME no hay indicios que apunten a un sabotaje o un secuestro. El avión, que desapareció el pasado lunes con 92 personas a bordo (entre ellas los españoles María Jesús Ginés y Jose María Grau), fue encontrado ayer y los encargados del rescate han confirmado que no hay supervivientes.
El avión salió de Quito con dirección a Tulcán, en la frontera con Colombia, cuando se produjo el suceso. "De la frontera con Colombia, todo nos pone nerviosos", ha afirmado el presidente Noboa a la estación de televisión Ecuavisa. No obstante, "nada nos lleva a que el accidente sea un acto de sabotaje o de secuestro", ha indicado Noboa.
Suspensión de las labores de rescate
Mientras tanto, las labores de rescate de las víctimas fueron suspendidas esta medianoche y pero se prevé que se reanuden a las 11.00 horas, cuando personal especializado en alpinismo comience el ascenso de la montaña, cuya cima esta helada, según ha precisado un portavoz del equipo de rescate.
El portavoz ha calculado que el ascenso a pie hasta el lugar donde se encuentran los cuerpos de las víctimas y los restos del avión durará varias horas y probablemente hasta primera hora de la tarde no se tengan resultados concretos.
El Boeing 727-100 de Transportes Aéreos Militares Ecuatorianos (TAME) que desapareció el lunes se estrelló contra la ladera occidental del volcán Cumbal, en una peña conocida como El dedo de Dios, y se ha descartado que existan supervivientes entre los 92 ocupantes, entre ellos 43 colombianos, dos españoles y un cubano.
Las primeras versiones oficiales señalan que el avión se estrelló contra el volcán, de 4.750 metros de altura, por causas desconocidas y, posteriormente, se incendió.
Testimonios de los socorristas han dicho que han encontrado cadáveres totalmente calcinados y restos del avión en un radio de unos 200 metros.
Otro siniestro
Este suceso ocurrió mientras continuaban los intentos por rescatar los cuerpos de 26 personas que viajaban en un avión de Petroecuador, que fue encontrado destruido la semana pasada, diez días después de su desaparición. Algunos de los pasajeros siniestrados se dirigían a la zona en el avión 727 de la TAME que se ha estrellado.
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