La Cruz Roja denuncia que los aviones de EE UU han destruido sus almacenes

Las bombas lanzadas hoy por aviones de EE UU sobre Kabul han alcanzado, por segunda vez, los almacenes del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) y han destruido dos de los tres edificios que quedaban en pie. "No pensamos que se trate de un error", ha señalado en Ginebra un portavoz del CICR, Kim Gordon Bates, que ha agregado que con la destrucción de estos dos edificios todas las operaciones del comité en la capital afgana se han acabado.

El ataque de hoy se ha producido a las 11.30 hora local (7.00 GMT, las 9.00 en España) ha afectado a dos de los cinco edificios que formaban el complejo en el que el CICR almacenaba todas sus reservas para Kabul y sus alrededores.

El pasado 16 de octubre aviones estadounidenses bombardearon el mismo recinto que ha sufrido importantes daños hoy, y otros dos edificios fueron alcanzados, uno de los cuales quedó completamente destruido.

Según ha enfatizado el CICR, el lugar, que se encuentra a pocos kilómetros del aeropuerto de Kabul, había sido claramente señalado a las tropas estadounidenses para evitar los ataques y sobre su techo había una gran cruz roja.

Una protesta formal

Bates ha indicado que la organización "está muy molesta por estos ataques, puesto que es le segunda vez que ocurren y difícilmente pueden tratarse de accidentes".

Tras los bombardeos, los guardias del centro de almacenes, las únicas personas que se encontraban en el lugar en el momento del ataque al tratarse de un viernes, han podido constatar que gran parte de los productos, principalmente víveres y equipamiento de asistencia, han resultado destruidos.

La organización piensa a protestar antes las autoridades de Estados Unidos "por la grave violación del derecho humanitario, con gran severidad, puesto que se trata de un segundo ataque", ha segurado el portavoz.

Según el portavoz, el martes pasado la organización había comenzado un programa de ayuda a 55.000 personas minusválidas en Kabul que, debido a las pérdidas de los equipos, ha quedado interrumpido.

Entre tanto, Kabul sigue siendo objeto de insistentes bombardeos por parte de la aviación estadounidense que, entre la noche de ayer y la madrugada de hoy, ha lanzado un total de 11 bombas contra la capital afgana, sin que la resistencia antiáerea de los talibán haya

podido hacer nada para impedirlo, según han informado varios testigos.

El primer ataque nocturno de la aviación estadounidense comenzó hacia las 22.00 de ayer jueves, hora local, (19.30, hora española), momento en el que se registraron las tres primeras explosiones en el interior de la ciudad.

Minutos más tarde, hacia las 22.45 (20.15, hora española), el casco urbano de Kabul fue objeto del impacto de cinco bombas, y otra cayó sobre la periferia norte, donde se encuentra el aeropuerto.

Casi cinco horas más tarde, a las 4.30 de hoy, (2.15, hora española), la aviación estadounidense lanzó otras dos bombas sin que la artillería antiaérea respondiese.

Además, esta noche (por la tarde en España) se han escuchado varios disparos de armas ligeras y explosiones de cohetes en las calles de Kabul tras una serie de ataques aéreos estadounidenses, según han indicado residentes en la zona.