El ex presidente filipino Estrada comparece ante el Tribunal Anticorrupción por perjurio
Cinco mil agentes vigilan la ciudad de Quezon para garantizar la seguridad del ex mandatario
La Policía Nacional ha desplegado a unos 5.000 agentes, 3.000 de ellos en torno al edificio del tribunal (situado en la ciudad de Quezon, a unos 10 kilómetros al norte de Manila), para garantizar la seguridad ante las informaciones de que existe una conjura para asesinar al ex mandatario. Ante la sede se ha concentrado alrededor de setenta personas para manifestarse contra Estrada.
La Policía había solicitado la celebración del juicio en el Hospital Memorial de Veteranos, centro donde se encontraba ingresado el ex mandatario desde el 12 de mayo, aunque finalmente el juicio ha sido celebrado en la sede del tribunal. La primera sala de la magistratura había rechazado una petición de los abogados del ex presidente para aplazar la vista de hoy.
El ex mandatario declaró en 1999 un patrimonio de 35,8 millones de pesos (unos 716.000 dólares), aunque la Oficina del Defensor del Pueblo calcula que durante los dos años y medio de su mandato acumuló ilegalmente unos 83 millones de dólares. Estrada dejó el cargo el pasado 20 de enero, cuando fue derrocado por una revuelta popular, encabezada por la oposición y la Iglesia católica, que llevó a la presidencia su vicepresidenta, Gloria Macapagal Arroyo.
Según Raymond Fortun, uno de los abogados de Estrada, la defensa espera que el proceso dure al menos cinco años; por el contrario, el Defensor del Pueblo, Aniano Desierto, que encabeza la acusación, ha afirmado que el juicio no durará más de 90 días.
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