Los secuestradores de un avión etíope se entregan a las autoridades de Sudán

El grupo de captores habían secuestrado horas antes, armados con fusiles y granadas, un avión militar etíope con 50 pasajeros que desviaron hasta el aeropuerto de la capital de Sudán, Jartum. Un representante de la Cruz Roja, otro de la ONU y un tercero del Gobierno sudanés han negociado con uno de los secuestradores hasta conseguir la rendición de todos ellos.

Salah Adín, ha explicado que los secuestradores pidieron trasladarse a un tercer país y solicitaron visados para Los Estados Unidos o el Reino Unido, pero los negociadores sudaneses lograron convencerles de que permanecieran en Sudán.

Se desconoce el contenido exacto de las negociaciones entre los secuestradores y el gobierno etíope que han llevado a un desenlace feliz del secuestro pero cuando han preguntado a Adín sobre los motivos del secuestro, el ministro ha declarado a la cadena estadounidense CNN que, a su juicio, los secuestradores "deseaban abandonar Etiopía".

El ministro de Información ha dicho que su Gobierno se mantiene en contacto permanente con el de Etiopía, el cual ha apoyado la forma en que se ha resuelto el conflicto, y ha apuntado que no sabe qué pasará finalmente con los secuestradores, ya que la situación legal "es compleja".

Pacífico desenlace

Todos los pasajeros liberados, familiares de los militares, están bien, pese a que una mujer se ha desvanecido tras abandonar el avión y una niña ha tenido que ser hospitalizada por deshidratación.

En declaraciones al canal de televisión por satélite qatarí Al Yesira, el ministro de Asuntos Exteriores sudanés, Mustafa Osman Ismail, ha informado de que las conversaciones han tenido lugar "cerca del avión" y ha confirmado que se trata de un aparato militar Antonov, de fabricación soviética.

El ministro de Información sudanés también ha señalado que uno de los guardias que viajaban en el avión junto a los tripulantes y el pasaje había conseguido huir del aparato al poco de aterrizar.

El aparato, según el responsable de la diplomacia sudanesa, viajaba desde la capital etíope, Adis Abeba, a un lugar no determinado, y fue desviado de su ruta por los secuestradores por lo que "tuvo que aterrizar en Jartum debido a que se estaba quedando sin combustible".

Estudiantes o militares

Hasta el momento no se ha confirmado si los secuestradores son un grupo de estudiantes o si son militares. Pese a que las autoridades y la televisión sudanesas han insistido en que se trata de estudiantes, fuentes etíopes han reiterado a la BBC y la emisora de televisión por satélite qatarí "Al Yesira" que se trata de "militares, cadetes de la Fuerza Aérea de Etiopía".

El ministro de Asuntos Exteriores sudanés, Mustafa Osman Ismaíl, dijo que el tripulante huido señaló que "los secuestradores son estudiantes, armados con fusiles de asalto y granadas".

La sospecha de que sean estudiantes surge de que más de 2.000 estudiantes universitarios, que fueron detenidos la semana pasada en Adis Abeba tras una manifestación de protesta por la "interferencia gubernamental" en actividades estudiantiles, que se saldó con 41 muertos, fueron liberados por las autoridades, hecho que coincide con el secuestro de este avión.

La protesta se inició debido a que las autoridades prohibieran la revista publicada por una asociación estudiantil. El Gobierno etíope afirma que estas revueltas fueron instigadas por "partidos de la oposición" y el Ministerio de Educación ha cerrado la universidad de Adis Abeba por tiempo indefinido.