EE UU veta el envío de observadores de la ONU para proteger a los civiles palestinos
Es la segunda vez que fracasa una iniciativa de este tipo desde el comienzo de la nueva Intifada
La resolución votada hacia la medianoche del martes (6.00 hora peninsular española) obtuvo los nueve votos necesarios para su adopción pero fue bloqueada por la oposición de EE UU, principal aliado de Israel.
A favor votaron los siete patrocinadores del proyecto, todos ellos miembros del Movimiento de Países No Alineados (MPNA), Rusia y China, mientras que Ucrania no participó en la votación, cuatro países europeos (Francia, Reino Unido, Irlanda y Noruega) se abstuvieron y EE UU votó en contra.
El embajador estadounidense, James Cunnigham, explicó su oposición al proyecto por ser "desequilibrado, inviable y por lo tanto imprudente".
El veto era más que previsible pero los patrocinadores del proyecto (Bangladesh, Colombia, Jamaica, Mali, Túnez, Mauricio y Singapur) querían una solución antes de que concluya hoy la cumbre de la Liga Arabe que se celebra en Amán (Jordania) y consideraban que era hora de pasar a la acción.
El embajador de Israel ante la ONU, Yahuda Lancry, ha reiterado su conocida oposición al envío de una fuerza de observadores a los territorios ocupados, que considera "innecesaria", y afirmó que la aceptación del Consejo habría ido en detrimento de la reanudación de las conversaciones de paz y el cese de la violencia.
La posición china no era ninguna sorpresa porque desde el principio su delegación sostuvo la conveniencia de una presencia internacional y ya votó a favor el 18 de diciembre, cuando fracasó
la primera propuesta al contar con solo ocho votos que, por ser insuficientes, hicieron innecesario un veto estadounidense.
Propuesta europea
Más inesperado fue el apoyo de Rusia, que, tras abstenerse en diciembre, se había mantenido bastante al margen de la negociación y favorecía la propuesta europea, mucho más ambigua que la del MPNA.
La gran incógnita era Ucrania ya que, según fuentes diplomáticas, estaba sometida a fuertes presiones estadounidenses.
Los países que se abstuvieron lamentaron la decisión del MPNA por considerar que se estaba muy cerca de un acuerdo sobre un texto que podía contar con el apoyo de todos los miembros.
Ese otro texto omitía la fuerza de observadores y se limitaba a pedir al secretario general de la ONU que consultara con las partes de cara a la creación de un mecanismo para ayudar a proteger a los civiles palestinos.
Varios miembros del Consejo, incluido Estados Unidos, han manifestado su disposición a proseguir los debates para adoptar en el futuro un proyecto de resolución basado en la propuesta de los países europeos.
Sin embargo, el futuro de la iniciativa depende ahora de los palestinos, que no descartaron la posibilidad de llevarla a la Asamblea General de la ONU, donde están representados los 189 países miembros y donde ninguno puede vetarla.
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