Cristina Pedroche no hablará de su embarazo en redes por “miedo”: “No sé si estoy lista para enfrentarme a críticas”
La presentadora denuncia en Instagram el acoso y los insultos que soporta desde hace años, y explica que quiere proteger del odio su vida personal: “Esto es lo más íntimo que tengo, lo más bonito que me ha pasado”
“Me da miedo”. Así de clara es Cristina Pedroche. La presentadora madrileña, de 31 años, ha explicado de esta forma en su cuenta de Instagram —con tres millones de seguidores— por qué apenas está subiendo fotografías. Pedroche y su pareja, el cocinero estrella David Muñoz, anunciaron el pasado mes de diciembre que esperaban la llegada de su primer hijo. Desde entonces la presentadora ha mantenido un perfil bajo en sus actualizaciones. “Esto es lo más íntimo que tengo, lo más bonito que me ha pasado y me da miedo no estar preparada para aguantar las malas palabras, las críticas y los malos comentarios”, continuaba Pedroche, que lleva soportando y denunciando el acoso en redes varios años. “Hoy casi sin querer he estado leyendo las burradas que me ponen en Twitter a raíz de la noticia de que voy a presentar un nuevo programa, y, no os voy a engañar, me duelen. Me duele que se critique sin verlo, sin darme una oportunidad, que parezca que nadie se alegra o incluso que me deseen mala suerte”.
Cristina Pedroche es una de las comunicadoras más populares de España. Su carrera despegó en el programa televisivo Sé lo que hicisteis... Desde entonces ha participado en proyectos como Zapeando, Pekín Express, El Hormiguero o Love Island. Desde que en 2015 presentara por primera vez las campanadas de fin de año su popularidad ha ido en paralelo al acoso que ha sufrido en redes. En 2019 compartió en su Instagram capturas de pantalla de algunos de los mensajes que recibe a diario: “Cerda”, “mongola”,”a ver si te secuestran y no te vemos más” o “payasa”, entre otros. Los insultos alcanzan especial virulencia con la resaca de Nochevieja, como la propia presentadora se encargó de explicar en otro escrito en sus redes en 2022.
La presentadora parecía haber desarrollado cierta coraza a este tipo de actitudes. “Cuando la gente no te acepta es porque tampoco ellos se aceptan a sí mismos”, decía en una reciente entrevista a EL PAÍS. Se refería entonces a las críticas derivadas de su trabajo. “A ese tipo de críticas estoy más acostumbrada”, continuaba la presentadora en su última actualización en redes sociales. “Pero no sé si estoy lista para enfrentarme a críticas sobre mi cuerpo por el embarazo o cosas peores que no quiero ni mencionar”.
El acoso en redes sociales es un delito penal que puede conllevar pena de prisión de tres meses a dos años. Esto no impide que se produzca con cierta regularidad, especialmente en mujeres y más aún si estas tienen cierta proyección pública. Este tipo de acoso se ha duplicado en los últimos 10 años, aunque los expertos aseguran que la gran mayoría de los casos no son denunciados. Las infracciones de este tipo han pasado de 63 en 2011 a 124 el año pasado, según los últimos datos sobre cibercriminalidad del Ministerio de Interior.
El caso de Pedroche es el último pero no el único. En 2022 la policía detuvo a la presunta acosadora de Candela Peña. Estuvo ocho meses enviando mensajes de amor y odio y amenazas de muerte contra la actriz y su hijo de 10 años. La modelo e influencer Laura Escanes ha manifestado en varias ocasiones que no para de recibir en su cuenta de Instagram mensajes, fotos y vídeos de contenido sexual de desconocidos. La presentadora Tania Llasera, el cantante David Bustamante o su compañero David Bisbal son otros de los personajes públicos que han tenido que hacer frente al odio y el acoso en redes sociales.
A pesar de que el acoso en redes a personajes públicos es acusado, no hay muchos estudios al respecto. Un informe de 2022 de la Universitat de València destacaba que las mujeres influencers sufrían con mayor intensidad el acoso sistemático en las redes sociales. “Todas hablan de que sistemáticamente son acosadas por las redes sociales, con comentarios fuera de lugar o subidos de tono. Es grave”, explicaba a este periódico uno de los autores del estudio.
No es el caso de Pedroche, que al margen de su impacto en Instagram ha desarrollado su carrera en el mundo de la televisión. “Yo no trabajo solamente de mis redes sociales, mi profesión a día de hoy es otra y si veo que a nivel personal me empieza a afectar, sintiéndolo mucho, tanto mi Instagram y las otras redes sociales pasarán a ser únicamente sobre mi trabajo”, ha zanjado la presentadora.
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