Elliot Page relata su lucha con la comida y que sufrió “depresión intensa, ansiedad y ataques de pánico severos”

Han pasado 15 años desde el estreno de Juno, la película que en 2007 hizo saltar a la fama a Elliott Page, cuando entonces todavía era Ellen. Pero ha sido ahora cuando el actor ha admitido en una entrevista para la revista Esquire que se sentía “encerrado” y obligado a usar un vestido durante la temporada de premios y promoción de la exitosa cinta, que le dio un Oscar a Diablo Cody en la categoría de mejor guion original. “Desearía que la gente entendiera que esa mierda literalmente casi me mata”, ha asegurado. El intérprete canadiense, de 35 años, habla abiertamente sobre su infancia, su carrera, su transición de género y su vida en el número de verano de la publicación estadounidense, que también le dedica la foto de portada.

“Estaba encerrado, vestido con tacones y todo el look: no estaba bien y no sabía cómo hablar de eso con nadie”, admite Elliot. Aunque asegura que no puede señalar cuál fue “el peor día” de esa promoción, sí que recuerda cómo tenía que soportar comentarios del estilo: “Oh, vete a la mierda, eres famoso, tienes dinero y tenías que usar un vestido”.

El intérprete, también conocido por su participación en Roma con amor o la serie The Umbrella Academy, explica que tuvo que lidiar con muchos demonios en una época en la que su carrera subía como la espuma: “A mis 20 años no sabía cómo decirle a la gente lo mal que estaba. Me reprendería por ello. Estaba viviendo la vida y mis sueños se estaban haciendo realidad, y todo eso estaba sucediendo. Y, sin embargo, por ejemplo cuando estaba filmando Origen [2010, Christopher Nolan] prácticamente no podía dejar el hotel en el que me alojaba”, recuerda. “Luché con la comida. Depresión intensa, ansiedad, ataques de pánico severos. No podía funcionar. Había días en que solo tenía una reunión y salía de mi casa para ir a ella y tenía que darme la vuelta”, añade.

Según Page, uno de los apoyos más importantes con los que contó en aquel momento fue la actriz Catherine Keener, con la que coincidiría en 2007 en el rodaje de An American Crime. “Vivía sola en un hotel y ella vino a buscarme. Viví con ella. Para mi vigésimo primer cumpleaños me hizo una fiesta sorpresa. Realmente no conocía a nadie, así que todos usaban etiquetas con sus nombres. Yo también usé uno. Nadie me conocía, y trajeron estos pequeños regalos divertidos. Fue muy dulce. Hay personas que conocí esa noche que están tatuadas en mi cuerpo”.

No es la primera vez que el actor ha admitido públicamente su frustración. En 2021, en una entrevista con Oprah Winfrey en The Oprah Conversation, Page reconocería que durante mucho tiempo, antes de declarar su transexualidad, se había sentido atrapado: “Por primera vez, no sé en cuánto tiempo, puedo simplemente estar conmigo mismo, ser yo, ser productivo y creativo. Es simplificarlo muchísimo decirlo así, pero estoy cómodo”, expresaba entonces.

Era principios del mes de diciembre de 2020 cuando el actor anunciaba que era trans y pedía que le llamaran por su nombre, dejando atrás su anterior identidad como Ellen Page. En esta misma entrevista, asegura que aquel código férreo de vestimenta impuesto por la productora no tiene nada que ver “con ser trans o cis”. “Muchas mujeres cis visten como yo me visto. Eso no tiene nada que ver con eso”. Y hace una última confesión, a modo de deseo retrospectivo: “Ojalá pudiera volver atrás y experimentarlo ahora. Como yo”.