Felipe (Froilán) Marichalar, sin mascarilla en la noche de Madrid

Felipe (Froilán) Marichalar ha sido fotografiado en la noche madrileña saltándose las normas impuestas para combatir el coronavirus. El sobrino de Felipe VI fue sorprendido acompañado de una amiga cuando caminaba por la calle sin mascarilla, fumando un cigarrillo y con una botella grande de Coca-Cola. Las imágenes fueron obtenidas por la agencia Europa Press la semana pasada pero difundidas este miércoles. Su hermana Victoria ha sido pillada también en varias ocasiones incumpliendo las recomendaciones de Sanidad contra la pandemia en los últimos meses. Ha prescindido de la mascarilla, no ha mantenido la distancia social e incluso ha sido vista abrazándose con sus compañeros de universidad a las puertas del centro privado en el que estudia.

Los hijos de Elena de Borbón y Jaime de Marichalar han demostrado en muchas ocasiones que son unos jóvenes rebeldes que no acatan las normas, lo que les ha costado más de un disgusto. Estas imágenes de Felipe ahondan en este comportamiento. El joven durante su paseo por Madrid se topa con una patrulla de la policía municipal, momento en el que sí se pone la mascarilla, como hacen el resto de los amigos que le acompañan.

El hijo mayor de la infanta Elena y Jaime de Marichalar pasó los meses más duros de confinamiento en el Alcuzcuz Boutique Hotel, a solo cinco kilómetros de San Pedro de Alcántara (Málaga). Un establecimiento que fue propiedad del fallecido Jaime Parladé, uno de los decoradores de la jet set. Ahora lo gestiona su familia. Uno de los sobrinos de Parladé es uno de sus mejores amigos.

El hotel Alcuzcuz, que abrió sus puertas durante el verano de 2016, está ubicado al pie de la carretera que une Marbella con Ronda, en el término municipal de Benahavís. Linda con dos urbanizaciones muy exclusivas: La Zagaleta y El Madroñal, así como La Heredia, que imita a un pueblo blanco andaluz.

A su alrededor existe un amplio catálogo de villas cuyos precios rondan entre los cinco y los diez millones de euros. Un nivel que no alcanza el establecimiento hotelero, que aun así tiene otros lujos: la tranquilidad, la privacidad y la historia que acumula la casa original, construida en el siglo XIX. Aunque se puede alquilar por completo, cada una de sus seis habitaciones y dos casitas individuales tiene un precio que oscila entre los 195 y los 275 euros por noche. Él no pagó, ya que era invitado de los propietarios, que se vieron obligados a cerrar el establecimiento al público. Con el estado de alarma todavía en vigor regresó a Madrid Froilán acogiéndose a una de las excepciones del BOE: “Retorno al lugar de residencia habitual”.

Victoria pasó el primer periodo de aislamiento en una finca de Jaén junto a su novio, el dj Jorge Bárcenas, y un grupo de amigos. Según publicó en sus redes sociales, que mantiene cerradas, en ese tiempo vio series como La casa de papel.

Felipe, de 22 años, y Victoria, de 20, estudian en una exclusiva escuela de negocios americana; el mayor estaba realizando unas prácticas en Londres cuando estalló la pandemia por lo que regresó a casa. El hijo mayor de la Infanta ha terminado el segundo curso de Business (Administración y Dirección de Empresas) en The College for International Studies (CIS), una universidad americana de Madrid en la que también está su hermana Victoria. Se trata de un centro privado en el que cada curso cuesta unos 20.000 euros. Tan solo cuenta con 200 alumnos, con una ratio de 15 pupilos por profesor. Juan Carlos I es quien se ocupa de pagar la educación de los hijos de la infanta Elena y de los de la infanta Cristina.