Vaitiare, la exnovia de Julio Iglesias, se enfrenta al cáncer

Vaitiare Hirshon es una desconocida para las nuevas generaciones pero hubo unos años en los que fue portada habitual de revistas del corazón por su relación sentimental con Julio Iglesias, pues mantuvo un largo noviazgo con el cantante tras su separación de Isabel Preysler. Ahora la exmodelo y actriz tahitiana, que vive en Estados Unidos, ha reaparecido para dar detalles de una vida personal que ha permanecido en la esfera privada durante los últimos años. Y lo ha hecho para hablar de dos momentos especialmente álgidos de su vida.

Hirshon está afrontando una dura etapa desde que ha sido diagnosticada de cáncer de médula, enfermedad de la que está siendo tratada en la actualidad. La modelo y productora ha contado lo que está viviendo y ha mostrado una serie de fotografías en las que se la puede ver sonriente y sin pelo, también muy esperanzada porque le acaban de retirar el catéter que ha necesitado. "Adiós, adiós, estoy bailando. Después de tres meses puede decir gracias y adiós a la fabulosa línea Hickman —así se llama el catéter— de mi pecho. Qué invento tan increíble. Ya no hay agujas para extraer sangre ni para recibir plaquetas o sangre. Día 96″, ha escrito Vaitiare en sus redes sociales junto a una fotografía en bañador. Los tres meses a los que se refiere son los que han trascurrido desde que se le realizó un trasplante de médula, del que ya habló cuando fue dada de alta: “Dios me dio una segunda oportunidad. Mi donante de Alemania, una joven de 26 años, es mi ángel. Espero que en unos años podamos conocernos. Me ha dado el regalo más hermoso”, dijo entonces.

La expareja de Julio Iglesias tiene dos hijos y fue su llegada la que precisamente motivó que se alejara del mundo del espectáculo. Su hija mayor, Tatiana, tiene ya 22 años y es fruto de su relación con el actor Michael Shanks, de quien se divorció para después rehacer su vida con el diseñador Edgar Asars, que es el padre de su hijo Kenta, de 16 años.

Vaitiare, que sigue manteniendo actualmente una relación cordial con Julio Iglesias y toda su familia, también relató en sus redes sociales un hecho que poca gente conocía y que sacó a la luz por la persistencia de su hija. “Hace tres años, mi hija de 18 años me sorprendió completamente. 'Mamá quiero hacer un cortometraje sobre el abuso que sufriste en Tahití cuando tenías ocho años. Por favor, cuéntame la historia.” La exmodelo explicó que pese a sus primeras reticencias decidió contarle la verdad a su hija y sacar a “la niña rota” que llevaba dentro de ella desde que ocurrieron los abusos.

“Fue mi primer día de regreso a Tahití después del divorcio de mis padres. Mi hermano y yo habíamos ido a comprar caramelos de coco ese día. Era una bonita tienda en nuestro barrio, con luces brillantes y pasillos limpios. Mi hermano se lanzó a una nueva máquina de pinball como una polilla a la luz, mientras que yo fui directa a la parte de atrás, mirando las bolsas de colores brillantes. El dueño de la tienda, un gran hombre, fue detrás de mí. A esa edad, en la isla, solo llevábamos un biquini. Me acarició los brazos, fue bajando y me penetró con los dedos mientras yo me quedaba petrificada, con un tremendo miedo que llenó todo mi cuerpo”. Vaitiare

Vaitiare continúa contando que aquel hombre, que ha quedado para siempre en su mente, paró cuando se acercó su hermano y el abusador le ofreció todo tipo de caramelos y helados gratis. Volvió en silencio a su casa porque necesitaba hablar con su padre y allí aún le esperaba una nueva noticia. “Niños, tenéis una nueva madrasta, tratadla con respeto”, le comunicó precisamente en ese momento la persona a la que estaba deseando contar lo que le había pasado. Fue corriendo a casa de su vecina, huyendo del caos, y la encontró rezando, algo que no era habitual en su casa porque no eran religiosos. Le enseño el padrenuestro en francés y según ella desde entonces esa oración forma parte de su rutina diaria.

Tras la experiencia los recuerdos dice que la empujaban a autodestruirse: “Empecé a fumar a los 10, a beber a los 14 y probé todo lo demás”, cuenta Vaitiare. A los 16 volvió a Tahití y cuando su padre, un hombre importante en la isla, conoció el asunto e iba a enfrentarse al abusador, a este se le murió una hija en accidente de coche. Todo eso se cuenta en el cortometraje que la hija de la expareja de Julio Iglesias escribió y dirigió, Far away places, pero solo fue hace unos meses que Vaitiare confesó que la protagonista de la historia real era ella y que aunque fue difícil para superarlo, el dolor puede autodestruir a las personas y se alegraba de que su historia pudiera servir a otros.

“La única solución que veo de esta epidemia de abuso infantil que experimentarán una de cada tres niñas y uno de cada seis niños es educar como padres para definir desde una edad muy temprana lo que es un comportamiento inaceptable, y comunicando estas situaciones de inmediato a un adulto para no sentir lo que yo y tantos otros han sentido en manos de otros. (...) Ha sido mi hija la que me ha mostrado el camino. El coraje de contar mi historia fue por el orgullo que tengo por mi hija y su objetivo de crear películas impactantes. Desde que empezamos he sentido que la ansiedad ha comenzado a desaparecer, siento energía y no quiero arrepentirme de nada". Un alegato que finalizó animando a compartir este mensaje y a convertir su experiencia en una fuerza motivadora.