Leonor y Sofía de Borbón, la nueva imagen de la monarquía en tiempos convulsos

Cuando hace seis años, el Príncipe de Asturias se convirtió en Felipe VI, una de las primeras medidas que tomó fue aligerar la representación de la familia monárquica española. Dejó claro quiénes conformaban la familia real y quiénes eran familia del Rey. Es decir, una cosa era la institución y otra bien distinta el parentesco. Así el círculo quedó reducido a los Reyes, a sus hijas y a don Juan Carlos y doña Sofía. Ahora, el monarca está ante la tesitura de empequeñecer aún más ese muro. Las informaciones que están apareciendo sobre el rey emérito afectan a la imagen de los habitantes del palacio de La Zarzuela. En medio de este tsunami y de manera paralela se ha intensificado la presencia pública de la princesa Leonor y la infanta Sofía, que encarnan el futuro y se han convertido en parte importante de la estrategia de comunicación. Esta exposición de las hijas de los Reyes estaba en parte prevista tras el debú el pasado mes de octubre de la Princesa de Asturias en los premios que llevan su nombre. Pero la aparición de la pandemia también ha precipitado los acontecimientos. Don Felipe y doña Letizia han querido que sus hijas estuvieran presentes en momentos significativos, como un solemne minuto de silencio en La Zarzuela, la misa organizada en la catedral de La Almudena por la Conferencia Episcopal, pero sobre todo con el mensaje enviado en un vídeo a los más jóvenes en el que rendían homenaje a los sanitarios y recordaban a las víctimas.

Otros años a estas alturas del verano Leonor y Sofía estaban en un campamento en Estados Unidos perfeccionando el inglés, conociendo niños de otras culturas y haciendo deporte. Esta vez la pandemia las has dejado en casa. La dos son conscientes del alcance de lo que está sucediendo en el mundo. Desde pequeñas, los Reyes se han ocupado personalmente de que sus hijas estuvieran informadas de la actualidad y también del trabajo que se realiza en La Zarzuela. La presencia de ambas en estos actos y en una videoconferencia con miembros de la Fundación Princesa de Girona, en la que de nuevo Leonor demostró su dominio del catalán, ha sido destacada por medios internacionales. En ellos la princesa y la infanta son vistas como el renovado y esperanzador futuro de la monarquía española. Tampoco falta el reconocimiento a la reina Letizia, que fascina en la prensa de medio mundo por su forma de actuar e incluso de vestir. La gira que los Reyes están realizando por el país también está siendo muy valorada y puesta como ejemplo de lo que deben de hacer otras casas reales.

Desde que estalló la pandemia y don Felipe emitió un comunicado en el que se desvinculaba de su padre y le retiraba la asignación no hay ninguna foto de don Juan Carlos. Solo la infanta Margarita dio noticias en mayo de que su hermano estaba bien y en el palacio de La Zarzuela. De doña Sofía solo ha habido una imagen captada en La Zarzuela durante una reunión de la fundación que lleva su nombre.

Durante la reciente visita de los Reyes a Palma se supo que tenían intención de pasar algunos días en la isla durante el verano pese a que este año la Copa de Vela se ha suspendido por la covid-19. Si doña Sofía mantiene sus hábitos también acudirá a Marivent. Pero este año más que nunca las fotos familiares serán difíciles de obtener. A quien no se espera es al rey emérito, que el año pasado regresó discretamente a Palma unos días. El cordón alrededor de los Reyes y sus hijas se ha estrechado más que nunca. La familia real ha quedado reducida al máximo. La próxima comparecencia de los cuatro será el funeral de Estado en memoria de las víctimas de la covid-19, previsto para el próximo jueves.