Raquel Perera, exmujer de Alejandro Sanz, en busca de una nueva vida

Raquel Perera cumple este lunes, 23 de marzo, 45 años. La exmujer del cantante Alejandro Sanz, con quien ha estado casada siete años y con quien tiene dos hijos en común, Dylan, de ocho años, y Alma, de cinco, ha recibido multitud de muestras de cariño a través de las redes sociales. Entre otras, la han felicitado Elena Tablada o la presentadora de televisión Sara Carbonero. “Feliz cumpleaños, amiga. Te abrazo con el alma más que nunca”, escribía Carbonero en su perfil de Instagram, a cuyos Stories subía un puñado de fotos de las dos juntas en distintos momentos.

El divorcio de Perera y Sanz se anunció a mediados del pasado mes de julio. Algunas publicaciones confirmaban lo que ellos mismos habían dejado entrever en sus respectivas redes sociales: “Somos una familia y siempre lo seremos. Decidimos amarnos para siempre y así será. Lo eterno tiene la complejidad y la ventaja de transformar las maneras de amarse en otras direcciones, sin destruir el cariño, la lealtad y la responsabilidad conjunta sobre nuestros hijos. Nuestra familia está por encima de cualquier cosa ... es diversa y bella, como la vida y así permanecerá. El mundo cambia, nosotros también, siempre amorosamente. Gracias por respetarlo”.

Ocho meses después, la relación entre ambos es cordial y Perera está rehaciendo su vida, en lo personal y lo laboral, creciendo y buscando nuevas oportunidades. Sigue viviendo en la ciudad de Miami (Florida, EE UU) junto a sus dos hijos, viajando con amigos y dejando entrever parte de su intimidad, que no de sus planes, a través de sus redes sociales (acumula 82.000 seguidores en Instagram). No concede entrevistas y ha decidido mantener un perfil bajo, mientras que a Sanz sí que se le ha visto con una nueva pareja, la artista cubana Rachel Valdés; por el momento se desconoce si Perera sale con alguien. La empresaria disfruta de Miami con sus niños y, con motivo de la crisis del coronavirus, ha pedido “guardar la calma y la paciencia para lo que nos viene”. “Desafortunadamente no puedo estar con mi gente en España”, se ha lamentado Perera, que ha dado información de un experto amigo “Os animo a que tengáis mucha paz, mucha tranquilidad, aunque sé que es muy difícil, aunque estoy segura de que con esta unión y este propósito que nos hemos hecho todos vamos a salir de esta”, despedía.

En los últimos meses, Perera está construyéndose una nueva vida. Después de cinco años de noviazgo y siete de matrimonio con Sanz, la madrileña era más que su esposa o la madre de sus hijos: era la mujer que gestionaba sus empresas y sus negocios. Psicóloga de formación, Perera ha formado parte del consejo de Gazul Producciones, la sociedad limitada que desde hace años gestiona los negocios de Sanz, y era la presidenta del mismo desde su incorporación, el 12 de abril de 2017. Además de en la parte musical, ambos montaron una empresa llamada Rosas&Beats que trataba de vender camisetas y a la vez lograr beneficios para colectivos desfavorecidos que no terminó de arrancar.

Sin embargo, con la llegada del nuevo año Sanz decidió airear la estructura de su empresa, y Perera desapareció de ella. El 23 de enero el cantante decidía optar por Óscar García Blesa —responsable de la oficina que gestiona su representación, y que además escribió su biografía, Vive, y codirigió en 2017 el documental Sanz: Lo que fui es lo que soy— como nueva cabeza al mando de su fundación, y por tanto Perera se convertía en expresidenta, exconsejera y exapoderada de Gazul Producciones y quedaba fuera del negocio.

Sin embargo, Perera tiene sus propios negocios. Intentó ser partícipe de un nuevo sistema de aprendizaje, el llamado Método Rainbow, que trata de inculcar a los niños muchos idiomas desde una edad muy temprana. Para ello abrió una escuela en Miami. Sin embargo, todo se torció cuando el creador del mismo, Keith Raniere, fue detenido por el FBI en abril de 2018 por ser el fundador y líder de la secta NXIVM. El centro cerró y Perera se desvinculó por completo del sistema.

Aficionada a la belleza, la exmujer de Sanz ha invertido en ella, en concreto de la firma Matriskin, de la que forma parte de "a nivel de gerencia y desde el principio, en 2009. Aparte de ser usuaria, claro”, como confirmó la empresa a este diario el pasado verano, tras su divorcio. De hecho, desde la empresa cosmética también la han felicitado en este cumpleaños tan redondo.