Un Madrid migrante, oculto y glotón por menos de 20 euros, tres experiencias que muestran otra cara de la capital

Madrid es de todos y no es de nadie, una ciudad que despierta un sentimiento de pertenencia a todo aquel que esté dispuesto a ser adoptado. Eso sí, se corre el riesgo de enamorarse. Porque en la capital cada vez se escuchan más acentos. Son esos mismos nuevos madrileños, como los llama la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, los que están creando una singular oferta de negocios cada vez más espectaculares y con experiencias cada día más diversas.

En la región, los inmigrantes han pasado de ser el 5% de la población en el año 2000 (260.507 de un total de 5,2 millones de personas) a ser el 21% en enero de 2022 (1,4 millones de personas de un total de 6,7 millones). Del club de los madrileños adaptados forman parte los productores de la obra de teatro Nuevos conocidos, que refleja lo difícil que es migrar y lo complejo que se puede volver querer probar suerte en una ciudad como esta.

A su vez, un emprendimiento de venezolanos con comida importada de Italia llamado il Morso muestra cómo la gastronomía de otro país se puede volver tendencia en un lugar donde la comida rápida no es considerada alta gastronomía. Y por último, un bar que mezcla el mentalismo con los cócteles acaba de abrir en Madrid y ya es tendencia en redes. Se llama Médium y busca abrir la mente de sus visitantes y mostrarles la importancia de confiar en la intuición para llegar a lugares insospechados: todo depende de qué estamos dispuestos a creer.

Un sábado de teatro en Palos de la Frontera

La obra de teatro Nuevos conocidos se ha vuelto tendencia entre decenas de latinoamericanos. Recién llegados, se sienten completamente identificados con las historias que se exponen durante una hora cada sábado en la Sala Usina (calle Palos de la Frontera, número 4) de la mano del director Alejandro Guzmán.

Cuatro actores migrantes de diferentes partes de Sudamérica, Mónica Ross, Ana María Mutis, Sebastián Rad y Mar Torrelles Giner, se conocen en una ciudad ajena en la que, a pesar de hablar el mismo idioma, a veces entenderse es todo un reto.

Los personajes tienen que decidir qué dejar atrás, qué llevar a Madrid y qué compromisos están dispuestos a asumir con tal de perseguir su sueño de ser actores en España. Todos los que han llegado a Madrid desde países como Colombia, Perú o Argentina, y como ellos, han tenido que vivir lo que significa sacar los papeles para la visa, el máster y el piso.

Y una vez se tiene todo eso, les toca empezar a buscar la forma de conseguir una cita para sacarse el NIE, empadronarse y conseguir la tarjeta de transporte y de salud, entre otras muchas vueltas burocráticas. “Es un viaje geográfico que también es profesional y personal, una oportunidad para conocer a otros como nosotros, y para conocernos mejor a nosotros mismos”, asegura Guzmán.

“La obra retrata a la perfección una realidad que viven muchos migrantes a la hora de llegar a España, en este caso específicamente a Madrid, de forma realista y con humor. Me encantó”, asegura la colombiana Aurelie Briet a la salida del espectáculo. Las entradas cuestan 13 euros y se pueden comprar en Atrapalo.

Una tarde de cócteles y mentalismo

El mentalista Pablo Raijenstein decidió crear un sitio donde la gente pueda tener una experiencia inmersiva y el que todo gira en torno a lo oculto y lo esotérico. El lugar ofrece servicios de tarot psicológico, psicografología, hipnosis, carta astral y lectura de manos acompañado de un cóctel por un precio entre los 11 y los 25 euros. Medium (calle del Pez, 18) se define como la única coctelería ocultista en Europa al estilo de los mejores salones victorianos. “Al igual que en las boticas alquimistas, en este local la gente podrá conseguir alimentos, medicina y encantamientos”, asegura Raijenstein.

Para los más escépticos, hay que decir que al bar se puede ir simplemente a tomar alguno de sus instagrameables cócteles. Uno de los preferidos de la casa es la Premonición, que lleva vodka moskovsjakva, albahaca, azúcar, mora, lima y kombucha de moringa y jengibre. Puede que un trago no otorgue la facultad de ver el futuro, pero lo parece.

Por otra parte, quienes estén interesados en algunos de los servicios extra deben solicitarlos al camarero. Una vez llega el turno, deben pasar por detrás de un espejo a una sala privada donde los estará esperando el mentalista. En el bar también se pueden comprar libros sobre magos, brujería y hechizos. “Es el Disney de lo sobrenatural”, asegura su dueño.

Las ‘focaccias’ de moda de Chueca

Tres venezolanos que se dedican a vender tequeños ―queso fundido envuelto en una masa de harina de trigo― a más de 700 restaurantes en Madrid conocieron el año pasado una máquina para hacer quesos en Italia. Este viaje los llevó a crear un nuevo negocio que abrió sus puertas hace pocos meses en Madrid y que ya se ha vuelto viral en TikTok. “Es lunes y estamos agotados. Este sábado vendimos más de 300 focaccias”, asegura uno de los socios, Marcos De Sousa.

il Morso (calle Augusto Figueroa, 18) es un pequeño local de comida para llevar con pocas mesas y sin camareros en donde las focaccias se hacen ante los clientes, Todas se elaboran con productos importados de Italia de primera calidad. Son bocadillos muy contundentes con 120 gramos de proteína y 100 de queso cada uno.

Los recomendados de la casa son la focaccia Come en casa de mortadela, stracciatella, pesto y pistacho, y la Diverso con prosciutto cotto, stracciatella di bufala y torturata. Los precios van entre 6,90 y 9,90 euros y, de lunes a viernes, tienen un menú de focaccia con helado de Nutella y bebida por 10,90.

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