Veredicto del crimen del Palace: culpables de matar a un empresario por sobredosis para robarle

Mihahil V. y Mohamed C. son responsables de haber suministrado al empresario estadounidense José Rosado el éxtasis líquido que paró su corazón en octubre de 2021. Así lo ha determinado un jurado popular por unanimidad este jueves, que ha determinado que es “incompatible con un consumo voluntario” la alta cantidad de droga que se halló en el cuerpo del fallecido. La víctima fue hallada muerta un día después de su encuentro con estos dos hombres en su habitación del hotel Palace de Madrid. En la estancia no había rastro de sus dos tarjetas de crédito, una tablet, un móvil y un reloj inteligente. El jurado ha considerado probado también que son los responsables de este robo y de tratar de extraer dinero de sus cuentas.

Cuando sucedieron los hechos, la víctima se encontraba en España pasando unos días en un viaje a medio camino entre el ocio y los negocios. Rosado había sido consejero delegado de Hijos J. Barreras, el mayor astillero privado español, un puesto que había abandonado en julio de ese año. Pero el estadounidense se había enamorado de España y conservaba buenos amigos, por lo que esperaba emprender nuevas aventuras empresariales aquí. La noche en la que murió salió por Madrid a tomar una copa y conoció en un bar de Chueca a los dos hombres ahora condenados por su asesinato. Les invitó a su hotel cuando cerraron los bares y permanecieron en la estancia una hora, como recogen las cámaras del edificio. A las seis de la mañana, estas mismas cámaras recogen la salida de los dos acusados con una bolsa. Rosado fue hallado al día siguiente muerto en su cama, después de 24 horas de búsqueda frenética por parte de sus familiares y allegados en Madrid y Miami.

El jurado ha considerado probado que “todo o la mayor parte del consumo” se produjo en esa hora en la que los tres permanecieron en la habitación y ha dictado que es imposible que la elevada cantidad de droga que se encontró en su organismo y que provocó una parada cardiaca fuera consumida de forma voluntaria. La policía halló restos del GHB o éxtasis líquido en la botella de vino y el vaso del que la víctima bebió, a pesar de que los culpables trataron de limpiarlo. El veredicto contempla también que Rosado estaba inconsciente cuando los dos hombres abandonaron la estancia, porque si no, habría sido capaz de denunciar ipso facto el robo de sus pertenencias. Pero Rosado dejó de contestar a su móvil poco después de conocer a estos dos hombres.

Según las pruebas que ha contemplado el jurado, después de abandonar el hotel, los hombres trataron de sacar provecho de las pertenencias de Rosado. Primero coonsideran probado que Mohamed compró tabaco en Móstoles, que después intentaron sacar dinero de su cuenta corriente y por último, uno de ellos acudió a un salón de juegos. Según el veredicto, la intención de los condendos era robar, pero sabían que suministrando esa droga, típica de los casos de sumisión química, podían provocar la muerte de su víctima.

En el proceso, el subinspector que lideró la investigación explicó al tribunal que en sus seguimientos comprobaron que los dos hombres salían cada noche de caza en busca de nuevas víctimas a las que robar. De hecho, cuando les detuvieron, los agentes encontraron en casa de Mohamed el pasaporte de un ciudadano mexicano al que habían robado sus pertenencias poco antes. Mihail, por su parte, se definió como chapero y argumentó que él iba a menudo a Chueca en busca de clientes y que a veces Mohamed le acompañaba. Aseguró que eso es lo que había sucedido la noche de la muerte de José y que se marcharon cuando él les dijo que no tenía dinero para pagar sus servicios. El jurado se ha inclinado por la primera versión.

“Por fin voy a poder dormir un poco”, ha resoplado el viudo de Rosado, Nic Young, después de que su abogado le tradujera a la salida de la sala todos los pormenores del veredicto. Young fue el que dio la voz de alarma en 2021 después de varias horas sin saber nada de su marido y ha hecho un gran esfuerzo por motivos médicos para estar presente durante las dos semanas que se ha prolongado la vista oral, que él ha definido como “el final” de este capítulo. Los dos letrados de las defensas han anunciado que recurrirán esta decisión. La próxima semana, la magistrada hará pública la sentencia.

No es el único caso de sumisión química a hombres en zonas de ocio de Madrid con el objetivo de saquearles. Cinco meses después del homicidio de Rosado, la policía detuvo a una banda especializada en esta práctica. Su objetivo eran turistas adinerados para evitar que denunciaran y se iniciara una investigación. Llegaron a dejar a varias de sus víctimas tiradas en la calle en coma. En el caso de Rosado, la dosis que introdujeron en su vaso de vino blanco, bebida de la que el empresario era un gran amante, fue letal.

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